Taylor Swift fue la gran ganadora de los premios MTV , en Los Angeles.
La cantante recibió cuatro premios. Miley Cyrus, que condujo, y Kanye West aportaron la cuota de polémica.
“Escuchen a los chicos”, decía Kanye West, mientras se dejaba aplaudir por los jóvenes presentes el domingo en la entrega de los MTV Video Music Awards 2015, fiesta conducida por Miley Cyrus, quien lució cambios de vestuario que dejaron ver mucha más piel que la que hubiera querido el Consejo Nacional de Padres, una organización que se quejó porque el show fue para chicos de 14 años para arriba.
West, quien estuvo todo el show sentado en primera fila con su esposa Kim Kardashian, recibió el premio Vanguardia, que la cadena entrega a los artistas influyentes. Pero a diferencia de Beyoncé y Justin Timberlake, quienes al ganarlo en las ediciones anteriores habían aprovechado sus 15 minutos para cantar o sorprender, tras recibir el galardón de manos de la gran triunfadora de la noche, Taylor Swift -mejores Video del año, Video Femenino, Video Pop y Colaboración-, Kanye sólo habló.
“La gente se acuerda de lo que pasó hace seis años en este mismo show (cuando Kanye la interrumpió diciendo que su premio lo merecía Beyoncé), pero lo que no saben es que cuando tenía 12, su disco College dropout fue el primero que compré en ITunes”, se sinceró Taylor.
Taylor es tan buena que también se amigó con Nicky Minaj cantando con ella su último hit, Bad Blood. Ambas cantantes se habían peleado online, cuando al conocerse las nominaciones Nicky se quejó porque no habían incluido su video Anaconda (por el que ganó como cantante femenina) entre los mejores del año, premio que terminó en manos de Swift.
Minaj había acusado a MTV de racista, Taylor dijo que entre mujeres no se tenían que pelear, y el domingo se abrazaron. Pero cuando parecía que la paz reinaba, la rapera aprovechó para provocar a la conductora del show, Miley Cyrus. “Volviendo a la perra que habló mal de mi en la prensa”, dijo Minaj; y Miley prefirió culpar al prestigioso New York Times, donde en una entrevista había dicho que Minaj no era amable. “Sabemos cómo la prensa manipula todo”, se defendió la ex Hannah Montana.
Y aunque todos los medios empezaron a hablar de esta pelea, vale recordar una más real en los VMA 1995, cuando Courtney Love le tiró desde un balcón su polvera a Madonna, mientras la reina del pop ofrecía una entrevista. Fue justamente Madonna quien inauguró la historia de estos premios, cuando en 1984 cantó Like a virgin saliendo de una torta, con un corsé y un velo de novia; la primera vez que se le vio la ropa interior a una artista en escena.
“Escuchen a los chicos. Nosotros somos los millennials, una nueva generación. Esta es una nueva mentalidad. Nosotros no vamos a controlar a nuestros hijos con marcas”, dijo Kanye West en su monólogo, en el que se candidateó para presidente, en 2020. “Iba a votar a Trump, pero ahora vamos por Kanye presidente”, acotó Cyrus. En rigor, Kanye está algo pasado de edad para ser milleniall, la franja de jóvenes nacidos entre 1980 y el 2000, que según la Casa Blanca en 2013 representaban la tercera parte de la población de los Estados Unidos.
Pero MTV escuchó a los chicos. De hecho, entre el teatro Microsoft y en el Orpheum, donde el domingo también hubo actuaciones en la calle -Pharrell con Freedom, por ejemplo-, se juntaron varios ex estrellas de Disney (ver recuadro La factoría...). En el complejo LA Live, la organización que puso en marcha MTV para sacar al aire la edición 2015 de los premios, fue impecable. Quedan ahora las quejas de la prensa de que el desparpajo de Miley solo no alcanza para que sea trascendente. Aunque los más jóvenes de la “generación Y”, que Kanye West quiere representar, parecen estar pidiendo justo eso.