La factoría Disney y el fin de la inocencia
Los fans de los shows más emblemáticos de Disney crecieron junto a sus estrellas, y ahora aplauden sus nuevas encarnaciones, como pasó en los Video Music Awards 2015. Más lejos que nunca de Hannah Montana, más cerca de la rebelde que dice malas palabras, repite todas las veces que puede la palabra “marihuana” y se vanagloria de mostrar el pezón (lo hizo mientras se cambiaba detrás de un telón y se vio en la pantalla en la sala pero MTV rápidamente lo borró del aire), Miley Cyrus fue una conductora irreverente. Y cerró el show cantando rodeada por drag queens, en un tema del álbum que le produjo el líder de Flaming Lips y que puso gratis online al terminar la ceremonia. Otra ex estrella del canal de Walt, Demi Lovato, cantó en el Orpheum mostrando que ella también se puede sacar ropa y ser sexy vestida sólo con un bustier y botas largas. Selena Gómez se la pasó sentada en primera fila al lado de su mejor amiga, Taylor Swift, y justo se levantó cuando estaba por actuar su ex Justin Bieber, así que no lo vio volar y dar 3 vueltas en el aire con arneses en el final del nuevo tema What do you mean? Justin se bajó un tanto mareado y se tapó la cara (¿llorando?) por un rato, mientras sus ‘beliebers’ lo consolaban y las cámaras enfocaban hacia otro lado. Nick Jonas inauguró la modalidad de cantar un tema en la alfombra roja y, como Bieber, también lanzó su nuevo video después del show. Finalmente, Britney Spears, que empezó su carrera en el Mickey Mouse Club, apenas presentó un premio. Al revés del resto, ella ya fue y vino; su momento de alto impacto fue en 2001, cuando se llevó puesta la edición de los VMA bailando con una pitón en el cuello.