Ante la ONU, Raúl Castro pidió el fin del embargo de EE.UU.
En su primera intervención en Naciones Unidas, el presidente cubano Raúl Castro pidió ayer el fin del embargo económico y comercial que Estados Unidos mantiene sobre la isla, y consideró que es el principal obstáculo para el desarrollo del país.
Castro definió el deshielo en las relaciones entre La Habana y Washington, tras más de un siglo de enfrentamiento ideológico, como “un importante avance”, pero subrayó: “El bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba por más de medio siglo causa desafíos y privaciones al pueblo cubano y es el principal obstáculo para el desarrollo económico de nuestro país”.
Castro, presidente de Cuba desde 2008, pronunció su primer discurso en Naciones Unidas como parte de la Cumbre del Desarrollo Sostenible. Mañana volverá a hacerlo ante la Asamblea General, la primera vez en 15 años que un mandatario cubano se dirige a ese foro. Fidel Castro habló por última vez ante el pleno en el año 2000. Después Cuba no volvió a participar del cónclave.
Como cada año desde hace más de dos décadas, Cuba está impul- sando en la Asamblea General de la ONU una resolución crítica contra el embargo, un texto que habitualmente obtiene un respaldo mayoritario, pero que, por primera vez, podría adoptarse sin el voto en contra de Estados Unidos.
El gobierno estadounidense informó esta semana que aún no ha tomado una decisión sobre cómo votará el documento. El presidente Barack Obama lleva meses reclamando sin éxito al Congreso de su país por este tema, ya que sólo el Parlamento puede levantar el bloqueo.
Raúl Castro, quien fue recibido con abundantes aplausos por los participantes en la cumbre, también denunció los “niveles inaceptables de pobreza” que sufren muchas partes del mundo, el aumento de la brecha entre Norte y Sur y el incremento de la “polarización de la riqueza”. Según dijo, “la inestabilidad en numerosas regiones tiene su raíz en la situación de subdesarrollo en que viven dos tercios de la población mundial”.
En ese sentido, consideró que los avances logrados en los quince últimos años con los Objetivos del Milenio han sido “insuficientes” y han estado “desigualmente distribuidos”. “En medio de la actual crisis económica y financiera, los acaudalados y las compañías trasnacionales se hacen cada vez más ricos, y aumentan dramáticamente los pobres, los desempleados y las personas sin casa debido a crueles políticas llamadas de austeridad”, denunció el mandatario cubano, aplaudido por la mayoría.