Pop alejado de las “cursilerías”
A 20 años de su primer álbum, la cantante de la banda escocesa habla de los cambios de la industria y los personales.
¿Fue tu idea hacer un disco para celebrar el aniversario de Garbage? No, no creo (Se ríe). Ni de Butch, creo... Probablemente fue de nuestro mánager, Paul... No tengo idea quien fue el primero en tirar la idea (Risas). Sé que es una ocasión muy especial para Garbage. Amamos a nuestros fans y estos son 20 largos años de amor entre nosotros y ellos.
Desde Los Angeles, Shirley Manson le pone humor al comienzo de una charla que tiene que ver con las dos décadas que cumple la banda escocesa, y con el lanzamiento de una edición remasterizada y con versiones inéditas, lados B y remixes de su álbum debut, Garbage, a modo de prólogo del nuevo material que la cantante promete para el año próximo. ¿Qué expectativa tenés con este disco? No tengo expectativa alguna. Sólo decidimos celebrar algo que consideramos significativo por el hecho de que seguimos estando juntos, sanos, y que volveremos a girar por el mundo. ¿Ves diferencias entre la industria musical actual y la de los ‘90? La música de la calle cambió mucho; la industria en sí, es la misma que antes, pero ya no es tan exitosa... (Risas). En los ‘90 se ganaba mucha plata... Ahora siento que están explotando a los artistas cada vez más. La industria siempre hizo foco en hacer plata. Por eso quiero mantenerme lo más alejada posible de ella; porque pienso que es como veneno. ¿Ahora tenés más libertad? Sí, mucho más. Pero aún en mi momento más exitoso, cuando la banda estaba en el mejor momento, en esos tiempos nunca fui tan miserable como ser humano. Lo que aprendí de grande es que lo que más me hace feliz es ser creativa. Y muchas veces ser creativo no va a la par de ser exitoso en la industria. Si uno es capaz de separarse de las expectativas de otros es increíblemente liberador. Soy mucho más creativa, más libre ahora que estamos un poco más lejos del foco que antes. ¿Sentís que Garbage sea uno de los sanos sobrevivientes de los ‘90? Sí, claro. Aunque teníamos una dinámica muy poco sana en esa época (Risas). Pero en el núcleo, en el corazón de la banda teníamos y tenemos algo muy puro. ¿Te fuiste o descansaste de Garbage? Nunca me fui. Tuvimos nuestras discusiones, problemas, como en todo grupo. En 2008 creo, decidimos que necesitábamos espacio, pero nunca dijimos que desarmábamos la banda. En ese momento, ¿qué te dio la actuación y qué te faltaba en la música como para cambiar de rumbo? Cuando me ofrecieron el rol en la serie de Terminator, aceptarlo me dio una oportunidad para volver a ser creativa, tomar riesgos, tener una aventura. Fue un año increíble para mí. Fue totalmente excitante y estimulante ¡Y loco! ¡Fue como estar en una fantasía! (Risas). ¿Volverá Garbage a la Argentina? No sé. Ojalá que cuando hagamos el tour del próximo disco, que será en el verano del año que viene, vayamos. Me encantaría volver. Estuvimos una vez y nos voló la cabeza. Una cultura y país increíble. Se dice que sos una persona negativa por tus letras... ¡Y tienen razón! Hay mucha música pop hablando de cursilerías y cosas demasiado felices... Siempre me gustó, entonces, señalar y resaltar las cosas que le gente pretende que no existen. Me gusta ver lo que la gente oculta atrás de sus máscaras.