Marmota, una investigación sobre el relato kirchnerista
Yo lo voté a Néstor. Esta confesión es la forma más sencilla de explicar este libro. No lo voté convencido, fui contra las políticas de los 90. Pero me convenció en los primeros tiempos, hasta que apareció el “modelo”.
El trabajo lo empecé a mediados de 2014 y una mañana de noviembre de ese año, Jorge Capitanich, en uno de sus habituales ataques a la prensa, me regaló el título: “Marmota”. Decidí hacerlo cuando, de repente, vi que los valores que siempre defendí, un buen día eran propiedad exclusiva del kirchnerismo. El que pensaba distinto, perdía toda posibilidad de compartir esos valores. Se habían apropiado de todas las banderas.
Habían escriturado los derechos humanos, la defensa de la libertad de expresión, los valores nacionales y populares y el respeto por las instituciones democráticas. El juego era claro, si no se estaba con ellos, los dueños de esas banderas, uno pasaba a tener las opuestas y era “gorila”, “autoritario”, cipayo.
Hasta que me dí cuenta que yo seguía en el mismo lugar, trabajando con mis mismos principios y viviendo con los mismos valores. Los que se habían corrido eran ellos y con la construcción de un relato forzado. Yo era mucho más parecido a lo que ellos decían que eran que a lo que realmente fueron.
Así nació “Marmota”, una inves- tigación periodística que, a través de historias y personajes, revela las contradicciones del modelo K y muestra los métodos que usaron para construir el relato, adoctrinar a sus seguidores y perseguir a sus críticos. Todo fue al revés. Dijeron respetar todas las opiniones pero hicieron culto del pensamiento único y multiplicaron el gasto millonario en pauta oficial para difundirlo en sus medios.
Néstor Kirchner fue padre de un “modelo” que se fue deformando a medida que pasaban los años y terminó de dinamitarse con su muerte. El debate histórico será el encargado de descubrir si el modelo fue cambiando y murió con él, o fue mutando porque así estaba planificado desde su origen y nos tomaron como marmotas.