La pelea por el bloque del PJ suma pretendientes
El duelo inicial era Juliana Di Tullio, por el minoritario pero compacto cristinismo puro, versus el gobernador saliente de San Juan, José Luis Gioja, en representación de los peronistas tradicionales. Sin embargo, las disputas subterráneas por la conducción del bloque del Frente para la Victoria, que desde el 10 de diciembre reunirá 98 voluntades (20 menos que hasta ahora) acaba de sumar otras alternativas. Desde el kirchnerismo duro, compuesto por los 23 camporistas y más de una docena de nostálgicos de Cristina, buscan ahora negociar con una figura más moderada que la de la combativa Di Tullio, por lo que surgió el nombre del ex moyanista Héctor Recalde, de mayor diálogo con el resto de los sectores internos. De todos modos, el disperso muestrario del interior coincide en que ahora le toca pasar al frente, tras años de “aguantar” el verticalismo de la Rosada, que impuso conducciones bonaerenses y puramente K. Como Gioja aún no logró consenso mayoritario y, además, aún tiene secuelas del grave accidente que sufrió al caer de un helicóptero hace dos años, sus pares de Salta, Juan Manuel Urtubey, y de Formosa, Gildo Insfrán, salieron a instalar a sus respectivos delfines. Por el lado salteño la opción es la de Pablo Kosiner, quien ya había dado pelea para reemplazar a Agustín Rossi y perdió la pulseada con Di Tullio, para recalar de vice
del bloque. En Formosa se cocina la candidatura de Juan Carlos Díaz Roig, un especialista en temas previsionales que ya va por su tercer mandato. Dicen que le toca por ser la provincia peronista que más porcentaje le dio a Scioli.