Israel aparta a los europeos del diálogo con los palestinos
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó ayer el cese de la participación de la Unión Europea (UE) en el proceso de paz con los palestinos, luego de que el bloque regional aprobara una norma que obliga a los importadores a distinguir los productos hechos en Israel de los producidos en colonias de territorios palestinos ocupados.
Después de varias amenazas verbales, Netanyahu finalmente actuó ordenando a su Cancillería “reva- luar la implicación” de la UE “en el diálogo político” con los palestinos, un proceso que, no obstante, está completamente paralizado desde hace mucho tiempo.
La medida israelí, aun si simbólica, podría tener un peso político importante dentro de las potencias europeas, la mayoría de las cuales son férreas aliadas de Tel Aviv.
“Para completar el proceso de revaluación, el primer ministro ( Netanyahu) ordenó suspender los contactos diplomáticos con las instituciones de la UE y sus representantes” en lo relacionado con el citado proceso de paz, explicó un comunicado oficial israelí.
La norma europea que desató la furia de Tel Aviv exige que los productos procedentes de los territorios ocupados no estén etiquetados como producidos en Israel, sino como oriundos de colonias israelíes en territorios reconocidos por toda la comunidad internacional como ocupados desde 1967.
Pese a que la distinción legal es reconocida y reivindicada por la comunidad internacional y la ONU, pocos países aceptan diferenciar los productos que vienen del territorio de Israel de los de los asentamientos.
La decisión de Netanyahu sobre las etiquetas fue anunciada el 11 de noviembre y comunicada en un tormentoso encuentro en la cancillería israelí al representante europeo Lars Faaborg Andersen, quien defendió la decisión definiéndola “técnica y no política”.