En el Congreso hay tres conflictos pendientes
Las dos vacantes de la Corte Suprema Fue el primer choque de Mauricio Macri con el Parlamento, tanto con la oposición kirchnerista –mayoría absoluta en el Senado y primera minoría en la Cámara de Diputados– como con sectores aliados, sobre todo de la UCR. Tras retirar los pliegos que envió Cristina, el 14 de diciembre intentó gambetear una costosa negociación en la Cámara alta para completar la Corte y nombró “en comisión”, por decreto, al peronista Horacio Rosatti y al radical Carlos Rosenkrantz para que ocupen transitoriamente las vacantes que dejaron Eugenio Zaffaroni y Carlos Fayt. Ante la amenaza del Fpv de no facilitar los dos tercios para confirmar las designaciones, el Presidente optó por activar el proceso de debate público de los pliegos, que enviaría al Senado entre febrero y marzo, acuerdo mediante.
Acefalía de la Bicameral que revisa los DNU Sus integrantes (8 diputados y 8 senadores) se reunieron el 22 de diciembre, pero no pudieron elegir autoridades. El postulante del oficialismo y sus aliados para presidirla, Luis Naidenoff (radical), y el del FpV, Marcos Cleri (La Cámpora), contaban con igual cantidad de votos: ocho. La negociación de Cambiemos con los senadores del PJ fue desconocida por los diputados K. Macri ya emitió cuatro decretos de necesidad y urgencia, pero nadie puede revisarlos aún.
Designación de un macrista en el Consejo de la Magistratura El titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, nombró al también oficialista Pablo Tonelli en la vacante que dejó la kirchnerista Anabel Fernández Sagasti. Los K trabaron la jura en la Justicia pampeana. La Corte admitió que debe definirlo la propia Magistratura.