Nicolás Vázquez Gimena Accardi Pareja de tiempo completo
En la primera nota que dan juntos, los actores hablan de “El otro lado de la cama”, la obra que estrenan mañana. Ventajas y desventajas de compartir trabajo.
Ocho años. Es lo que lleva la relación entre Gimena Accardi y Nicolás Vázquez en la vida real y que se va a reproducir en el escenario, aunque no exactamente en los mismos términos. La pareja estrena mañana El otro lado de la cama (Ver Historias...) en el teatro Apolo, una comedia que apela al humor para hablar de cuestiones sentimentales de a dos que van desde la fidelidad hasta la amistad, entre otras cosas. Vázquez: Con la obra, te reís desde que empieza hasta que termina. ¿Te reís para no llorar? Vázquez: Y... sí. Es una comedia que vengo persiguiendo desde hace más de 10 años. Me la ofrecieron en 2005, en 2007, en 2009 y en 2011, y siempre por algún motivo se postergaba o no se podía hacer. Siempre pensé que era una obra para hacer con Gimena. Pero no porque fuera mi pareja, sino por su manejo del género,
por su naturalidad. Así que cuando el productor Javier Faroni me llamó, lo primero que le dije es que quería trabajar con Gime. Fue genial porque era lo que él estaba buscando.
Accardi: No tuvimos dudas: queríamos hacerla juntos. Es como si la obra los hubiera esperado.
Vázquez: Te juro que sí, creo en eso. La obra estuvo 10 años en cartel en España, después hicieron la película. No entiendo por qué nunca se hizo antes acá. Hace ochos meses me puse el libro en la mesita de luz sin saber todavía que la íbamos a hacer. Muchas veces nos ofrecieron trabajar juntos, pero si no era algo fuerte que de verdad nos entusiasmara, no nos interesaba. ¿Es riesgoso mostrarse en el escenario juntos como pareja? Supongo que la química será una ventaja pero, ¿hay más roces?
Accardi: El contacto físico está buenísimo, porque eso siempre te cuesta más con un actor que no es tu novio. En nuestro caso, le da más verosimilitud a la obra. Por otro lado, la historia que contamos es lo más difícil, porque es muy distinta a la nuestra, con personajes muy distintos a nuestras personalidades. ¿Creen que puede ser un gancho extra para el público saber que son pareja real? Hubo algunos casos en los que eso de llevarse el trabajo a casa se les volvió un poco en contra.
Siento que el amor no es trabajo, no es algo que implique esfuerzo”. Gimena Accardi Yo necesito la tranquilidad de ella y ella mi empuje. El equilibrio está bueno. Es necesario complementarse”. Nicolás Vázquez
Vázquez: No creo. En ocho años compartimos mucho tiempo, porque nos gusta estar juntos. Y creo que esta obra nos llegó en un momento ideal de madurez. Accardi: Nosotros no tenemos problema con llevarnos el trabajo a casa, pero no es de obsesivos. Es lo que nos gusta. Siempre nos consultamos con los proyectos de cada uno, nos acompañamos. Cada vez que él hace teatro, intento ir a verlo a todas las funciones porque me encanta. Y él, lo mismo. Es una forma de contención y de crítica también, porque nos conocemos mucho y es bueno el ida y vuelta. Sabemos hasta dónde el otro puede dar lo mejor. Tal vez es un prejuicio, pero el hecho de que sea una comedia, ¿lo hace más fácil que si tuvieran que protagonizar a una pareja atravesando un drama? Accardi: Probablemente sí. Vázquez: Tal vez. Aunque la obra se mete con temas graves, es muy luminosa. Y las canciones de rock nacional acentúan el tono de comedia. Pero no es una comedia musical. Accardi: Una de las cosas más lindas es que, además, estamos experimentando el placer de hacer, cada uno, su hobby. En el caso de Nico es cantar y en mi caso, bailar. Vázquez: Lo estamos disfrutando mucho. En una época en que las relaciones de pareja parecen tan vulnerables, ¿cómo evolucionó el vínculo entre ustedes en estos años de relación? Accardi: Yo tengo una opinión muy personal que pocos comparten conmigo. Siento que el amor no es trabajo, no es algo que implique esfuerzo. La convivencia no implica una lucha para sostenerla y todas esas cosas. Se da o no se da. Yo trabajo afuera y cuando llego a casa no quiero trabajar por el amor o para mantener una relación. Si no fluye el amor que es el sentimiento más hermoso que podemos tener, no tiene sentido. Las discusiones existen, claro, pero la convivencia no tiene que ser una lucha. Vázquez: No sirve algo que sea forzado, seguir por sostener algo a toda costa o por los hijos.
Accardi: Siempre habrá cosas del otro que te molesten y viceversa. Incluso hasta eso, con el tiempo, te lo tomás distinto. A mí ya me divierte la impaciencia de Nico, Yo soy pachorra y él quiere todo para ayer. El es una agenda viviente; yo no me acuerdo de nada. Algunos podrían ver su relación un poco empalagosa.
Vázquez: Depende de cada uno. En las redes sociales parece que estamos todo el tiempo subiendo fotos, pero no es así. Tal vez porque se ve todo junto. Yo necesito la tranquilidad de ella y ella mi empuje. El equilibrio está bueno. Porque es necesario complementarse. El secreto está en divertirse. Tengo mucha suerte de haber encontrado a una mujer que piensa en mí. No competimos entre nosotros, porque tampoco somos competitivos fuera de la relación. Cuando uno se preocupa por el otro, todo fluye. Si nos preocupáramos por el prójimo, también fuera de la pareja el mundo sería mejor.
Accardi: No somos la mejor pareja del mundo y tampoco sabemos si vamos a seguir toda la vida juntos. Nuestra pareja es un vaso de agua en el desierto.
¿Cómo ven su futuro? ¿Hijos? Vázquez: No planificamos mucho, nos dejamos llevar y eso nos alejó bastante de la rutina. Accardi: Depende de muchas cosas, en algún momento vendrá. Vázquez: El nuestro fue un encuentro que tenía que suceder.