DANIEL OSVALDO Por la revancha
Se incorporó a la pretemporada en Los Cardales. Firmará por 18 meses y cobrará la mitad del contrato anterior.
Musculosa amarilla con el escudo de Boca, pantalones cortos y botines blancos. Pablo Daniel Osvaldo salió de una de las habitaciones del Hotel Sofitel con la cara de un niño en el día de los Reyes Magos. Hacía menos de una hora que había llegado a Cardales, sobre la ruta 9, en Campana, pero poco le importó: DaniStone se cambió y bajó corriendo a buscar a sus compañeros, que se entrenaban en una de las canchas del complejo. Abrazo va, abrazo viene, el delantero se unió en el primer trabajo que estaban realizando, precisamente un “lo
co”. Así, como si el tiempo no hubiera pasado, Osvaldo comenzó a sentir en carne propia lo que hasta hace unas semanas era un sueño: volver a vestir la camiseta de Boca, en el que será su segundo paso por el club de sus amores. Y ahora va por la revancha...
El día del delantero había comenzado bien temprano. Antes del mediodía (y con la tranquilidad de tener bajo el brazo la rescisión de su contrato con el Porto, de Portugal), el Loco se realizó la revisación médica en una clínica de Palermo. Luego, comenzó a ponerse en marcha la logística para su llegada a Cardales. Cerca de las 18, finalmente, Osvaldo arribó al kilómetro 61 de la Panamericana, donde lo aguardaban un grupo de hinchas para darle la bienvenida. Vidrio de por medio, el delantero saludó con su mano e ingresó al predio del Sofitel, donde fue recibido por el dirigente Juan Carlos Crespi y por Fabián Fiori (hombre del club cercano al plantel). “Se lo nota enchufado, vino con todas las ganas”, aseguraron quienes lo vieron en esa llegada y también destacaron que el Loco no paró de sonreír en ningún momento. Tras esa bienvenida improvisada, Osvaldo subió a una de las habitaciones del hotel para cambiarse y rápidamente bajar a reunirse con sus compañeros, que finalizaban la merienda, previa al entrenamiento vespertino pautado por el cuerpo técnico.
Finalmente, pocos minutos después de las 19, el regreso se materializó. Agustín Orion, quien estaba realizando movimientos de calentamiento junto a Fernando Gayoso (el entrenador de arqueros), fue el primero en cruzarse con el goleador. Tras un efusivo abrazo, el delantero se metió en el
“loco” que estaban realizando sus compañeros para luego fundirse en otro abrazo, esta vez con Rodolfo Arruabarrena. El técnico había avisado que esta semana pretendía contar con el delantero para así comenzar a planificar el 2016 con su delantera goleadora. Uno por uno, los diferentes jugadores fueron saludando al nuevo integrante del plantel del campeón argentino.
Se sabe: Osvaldo -que el martes cumplirá 30 años- resignó dinero en la rescisión de su contrato con Porto para poder cumplir su sueño de volver a vestir la azul y oro.
Tendrá un condimento especial, ya que compartirá plantel con su amigo Carlos Tevez, con quien jugó en Juventus, de Italia (entre los dos marcaron diez goles cuando estuvieron juntos en cancha), y con quien tuvo un saludo especial de bienvenida cuando se cruzaron por primera vez en el entrenamiento. Osvaldo realizó trabajos diferenciados para ponerse a punto. El objetivo, claro, será pelear por la Copa y mejorar los números de su anterior paso por Brandsen 805, esos que indican que disputó 16 partidos y marcó 7 goles. “Con Osvaldo le sumamos más jerarquía al mejor plantel de la Argentina”, graficó el vice Horacio Paolini.
La presentación oficial, en principio, será mañana, una vez que Osvaldo firme el contrato que lo vinculará con Boca por los próximos 18 meses (cobrará la mitad de lo que percibía en su anterior paso por el club). Hoy, por lo pronto, volverá a entrenarse bajo las órdenes del Vasco, quien lo imagina como el centrodelantero del equipo al lado de Tevez y más adelante del uruguayo Nicolás Lodeiro.
A pesar de que en un momento Darío Decoud, su representante, había afirmado que el pase no se haría y que el futbolista se quedaría en Portugal hasta junio, ayer el Loco lució el escudo de Boca en su pecho, tal como él soñaba. La motivación, ese factor tan importante para un futbolista, Osvaldo la encontró en su corazón. Ahora, tendrá su gran revancha en Boca, con la Copa Libertadores como el gran objetivo a cumplir, claro.