Jesús Méndez: “Ya es hora de que ganemos algo”
El mendocino despejó cualquier duda sobre su conmtinuidad: “Tengo muchas ganas de estar acá”.
Una sonrisa se le dibuja en el rostro a Jesús Méndez. No es para menos. Sabe que encontró su lugar en el mundo y no puede disimularlo. “Los dirigentes confiaron en mí y me respetaron, mis compañeros me ayudaron cada día y los hinchas me demostraron su apoyo. Estoy muy agradecido a todos por esa confianza. Realmente me siento feliz de seguir en Independiente, es donde quiero estar”, comentó ayer tras el único turno de entrenamiento en el predio de Villa Dominico.
El volante mendocino, de 31 años, selló el miércoles la renovación de su contrato hasta junio de 2018. Además, logró una sustancial mejora salarial, una cláusula de rescisión (si surge una oferta del exterior) y la posterior actualización automática por otros 18 meses.
“Nunca tuve ningún problema en arreglar, solo había cosas por conversar. Mi prioridad siempre fue jugar en Independiente. Tengo muchas ganas de estar acá”, afirmó acerca de las dudas sobre su continuidad y la demora en la negocia- ción por la firma del contrato.
Lamentó la partida al Flamengo del capitán, Federico Mancuello, a quien consideró una pieza “importantísima” por su aporte dentro y fuera de la cancha. También la de Matías Pisano al Cruzeiro, aunque confía en que el equipo no perderá protagonismo y apuntó a la necesidad de ganar un título tras una sequía de trece años en torneos locales. “La dirigencia hizo un enorme sacrificio para levantar el club en su peor momento y fue importante mantener la base del plantel. Ahora nos toca a nosotros, ya es hora de que ganemos algo”, remarcó.
Además, evitó considerarse como uno de los referentes. “Tengo mi experiencia y otros compañeros también la tienen. No me siento un referente. Somos iguales, nos respetamos y apoyamos, luchamos por el mismo objetivo”, señaló.
Destacado por su buen rendimiento en la última temporada, igualmente se le objeta la acumulación de tarjetas amarillas por la rigurosidad en su manera de jugar. No esquivó esa referencia directa y sentenció con firmeza: “Siempre jugué así en mis trece años como profesional, no voy a cambiar ahora. Me pagan por entrar y dejar todo en cada pelota. Es lo que siempre hice, esa es mi personalidad”.