Propiedades y autos: mercado cauto pero con “expectativas”
Por ahora, sólo expectativas. El mercado inmobiliario, con el nuevo gobierno, logró reordenar la forma de pago. Pero la salida del “cepo”, que le puso un valor cierto al dólar, no implicó un aumento en el nivel de escrituras en el arranque del año ni tampoco un retorno a la pesificación. Las operaciones, sobre todo en Capital Federal y Gran Buenos Aires, se siguen realizando en dólares.
En 2015, las ventas aumentaron un 11% respecto a un 2014 que fue uno de los peores años del mercado inmobiliario desde 1998. “El verano es una etapa históricamente baja. El mercado retoma la actividad hacia fines de marzo. Los valores no cambiaron y nadie -ni propietario ni desarrollador- está apremiado por vender. El gran desafío será ampliar la demanda. Hasta ahora, el perfil del comprador es siempre el mismo: el que tiene capital ahorrado, con dólares fuera del sistema financiero. Si bien las expectativas son positivas, porque se juzga que éste es un gobierno amigable con la inversión, si no se abren condiciones para que una persona que cobra un salario tenga posibilidades de acceder a un crédito para la compra de vivienda, nadie espera un repunte extraordinario en las ventas. El mercado seguirá acotado”, indica el arquitecto José Rozados, director de Reporte Inmobiliario.
El mercado automotriz cerró el año 2015 con un patentamiento de 643.668 vehículos en la Argentina. Un 6,3% menos que en 2014. Este enero, aún con la reducción de impuestos internos en autos de alta gama y otras medidas de reducción de retenciones a las exportaciones industriales que alentaron a la industria automotriz, se patentaron 56.511 vehículos, que representó una caída del 15% en el cálculo interanual, frente a un patentamiento de 66.489 de enero de 2015, y un 48% menos frente a enero de 2014.
Una fuente de ACARA, la asociación que agrupa a las concesionarias, consultada por Clarín, expresó: “Enero fue f lojo. En la primera quincena no había precio de referencia y eso impidió que se concretaran muchas operaciones. También hubo problemas de oferta de automotores, muchos modelos no estaban disponibles, pero la demanda sigue activa. Las expectativas en el mediano y largo plazo son favorables porque suponen una mejor planificación”, indicó.