Almagro vive su primavera
“Las dudas quedaron lejos, me llené de positivismo, comencé una nueva etapa y una nueva vida”. Así, con la energía renovada y la confianza bien en alto, encaró Nicolás Almagro el Abierto de Argentina. Y así llegó a la final del torneo en la que hoy buscará repetir el título que ganó en 2011. El español, 72° del mundo, venció ayer en un duelo de ex campeones a su compatriota David Ferrer, sexto del ranking, por 6-4 y 7-5 en el partido que cerró la acción de otra jornada calurosa en el Buenos Aires Lawn Tennis Club.
Ferrer, tres veces ganador del torneo en 2012, 2013 y 2014, tuvo una jornada ocupada. Porque al mediodía tuvo que completar su encuentro de los cuartos de final ante el uruguayo Pablo Cuevas que se había suspendido el viernes por la lluvia. Se impuso por 6-4, 1-6 y 6-3 -levantó un 2-0 en el tercer set- y dio otro paso adelante. Y aunque tuvo sólo un par de horas para recuperarse antes de volver a la cancha, en el duelo que definió al segundo finalista no le hizo el desarrollo fácil a Almagro.
Pero el murciano volvió a jugar un partido de altísimo nivel -como el que había jugado en los cuartos de final ante Jo-Wilfried Tsonga- y se llevó una victoria que esperaba desde hacía tiempo. Es que fue la primera vez en 16 encuentros que pudo ganarle a Ferrer.
“Tomé siempre la iniciativa y eso me dio réditos; es una victoria especial porque nunca había podido ganarle a David”, afirmó Almagro, que había perdido con el mismo adversario en las finales de 2012 y 2014.
“Esta final es un premio a tres meses de trabajo intenso. Está claro que derrotar a dos top ten en partidos seguidos me da mucha confianza. Además es importante porque me hace saber que estamos haciendo las cosas bien y que estoy bien físicamente. Ojalá lleguen muchas victorias más”, analizó quien enfrentará a Dominic Thiem, un rival que viene jugando también en un altísimo nivel. Para Almagro será su 22ª final (siempre sobre polvo de ladrillo donde tiene un record de 12 victorias y nueve derrotas) en el circuito.
“El es un tenista peligroso, que te exige siempre al límite. Es muy sólido y muy agresivo y por algo pudo ganarle a Rafa”, anticipó Almagro, que hoy intentará volver a gritar campeón en un torneo en el que se siente como en su casa.
Seguramente querían una final Rafa-David, pero un Almagro-Thiem no está nada mal, ¿no?”
Nicolás Almagro
TENISTA ESPAÑOL