Los autos fantásticos
El diputado K y su mujer usaban un Passat y una camioneta 4x4 que eran propiedad del gremio de obreros marítimos.
Se supo que con su mujer, la senadora Fioramonti, usaban un auto Passat y un a camioneta Kuga 0km que les daba el gremio de obreros marítimos. También le pagaban el seguro, la patente y otros gastos. Investigan si es un caso de dádivas.
El diputado ultrakirchnerista Carlos Kunkel y su mujer, la senadora Cristina Fioramonti, utilizaban un auto Passat y una camioneta Kuga 0 Km comprados por el SOMU (Sindicato Obrero Marítimos Unidos), que también tenía a su cargo la responsabilidad civil y los gastos de seguro, patente y mantenimiento. Lo reveló este lunes la Revista Puerto, especializada en el sector pesquero, a partir de una auditoría realizada por la Comisión Interventora de ese gremio.
El artículo, firmado por la periodista Karina Fernández, recuerda que la estrecha relación entre Kunkel y Omar Suárez “no es nueva y se conoce desde hace tiempo”, ya que ambos solían compartir comidas y viajes. De todos modos, “las prebendas recibidas por el legislador no contaban hasta ahora con documentación probatoria”.
La Comisión Interventora del SOMU encontró una autorización firmada por Juan Manuel Medina, presidente de la Obra Social, en representación del gremio ante escribano público, para “comprar y mantener los autos del matrimonio” de políticos kirchneristas.
La Comisión Interventora del SOMU, compuesta por Santiago Viola, Jorge Alonso y Gladys González, halló que el automóvil Volkswagen Passat 2.0 dominio LMJ 534 y la camioneta Ford Kuga 4x4 dominio LZW034, que figuraban a nombre del SOMU, eran utilizados por el diputado nacional y la senadora provincial del FpV.
En la expedición de célula firmada por Juan Manuel Medina, secretario de la Obra Social, el sindicato acepta hacerse cargo de “la responsabilidad civil por los daños y perjuicios que se produzcan con el automotor” y “la circulación dentro del país como el egreso temporario del mismo” a favor de Kunkel, Fioramonti y otros otras tres personas. Una de ellas sería integrante de la planta permanente de la Cámara de Diputados, y posiblemente se haya desempeñado como chofer del matrimonio.
“Esta es la primera prueba que se conoce de los gustos que se daban el diputado y la senadora con la plata de los marineros”, indicó el artículo, que además recuerda que “Kunkel fue un invitado de lujo en muchos convites a través de los años en los campos que el SOMU tiene en la Patagonia”.
La semana pasada, la sala 1ª de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal hizo lugar a un pedido que oportunamente habían hecho ex directivos del gremio para que se les reconozca su derecho a apelar el fallo de Rodolfo Canicoba Corral que dispuso la intervención. Pero la medida no cuestiona la intervención, pese a que sectores ligados a Suárez intentaron presentarla de esa manera.
La relación entre Kunkel y el controvertido sindicalista Suárez, que está siendo investigado por la justicia federal, era tan estrecha que en diciembre pasado el diputado eligió Monte Caseros, ciudad natal de “El Caballo”, para despedir el año. Claro, en el hotel que Suárez construyó “para el SOMU” a la vera del Río Uruguay y al que le puso el nombre de su mamá, Belinda.