Ahora Maduro acepta abrir un canal de negociación con EE.UU.
Lo anunciaron el presidente venezolano y el canciller John Kerry en el marco del diálogo de la OEA en Dominicana.
En un sorpresivo giro político, el presidente Nicolás Maduro anunció ayer que Venezuela y Estados Unidos iniciarán una “nueva etapa de diálogo”. Los contactos fueron confirmados por el secretario de Estados, John Kerry, quien adelantó que el subsecretario de Estado, Thomas Shannon, viajará “tan pronto como sea posible” a Caracas para liderar las tratativas, aunque no se estableció ninguna fecha hasta ahora.
Esto ocurre cuando arrecia una fuerte presión internacional, incluyendo a varios países latinoamericanos, que reclaman soluciones urgentes a la grave crisis política y económica de Venezuela. Hasta ahora, Maduro había acusado de los mayores problemas de su gestión a la Casa Blanca, a la que adjudicó la dirección de una “guerra económica” contra Caracas.
La situación de Venezuela impactó ayer en la primera sesión de la Asamblea General de la OEA, realizada en Santo Domingo, donde antes del anuncio de diálogo hubo un fuerte cruce entre Kerry y su par venezolana, Delcy Rodríguez. Sin embargo, ambos bajaron luego el nivel de confrontación y tuvieron sorpresivamente una reunión en privado, donde acordaron abrir un canal para discutir soluciones.
A las pocas horas Maduro habló sobre el tema en un acto oficial transmitido por cadena nacional. “Ellos propusieron que iniciemos una nueva etapa de diálogo con nuevos canales de comunicación y un conjunto de encuentros a alto nivel de manera inmediata, y yo le dije a la canciller: ‘aprobado’. Vamos a iniciar esa serie de encuentros de alto nivel, estoy de acuerdo”, dijo. Inclusive afirmó que estaba “listo para designar embajadores y regularizar relaciones” entre ambos países, cuyos gobiernos re- tiraron sus representantes diplomáticos en 2010. Kerry también se refirió al tema tras el encuentro con Rodríguez, que duró unos 40 minutos. “Conversamos sobre el referendo revocatorio. Tratamos de decirle que el gobierno debe responder mostrando apertura y respeto de su propia ley”, señaló. “Creo que es más constructivo dia- logar que aislarse. Hay que superar la vieja retórica”, agregó.
En la Asamblea de la OEA realizada ayer, Kerry jugó una carta fuerte. Anunció que apoyaba al secretario general del organismo, Luis Almagro, en su propuesta de reclamar la realización del referéndum revocatorio de mandato elevado por la oposición venezolana. También se mostró proclive a debatir la Carta Democrática Interamericana, que tanto escozor provoca en Caracas.
Después de hablar de “crisis humanitaria” y citar las carencias de medicamentos y productos de primera necesidad, Kerry reclamó la “liberación de los presos políticos y el respeto a la libertad de expresión”. Esto provocó la reacción de la canciller Rodríguez. “Siento que ha hablado el amo del mundo, que tiene además el atrevimiento de opinar de otros países. Los asuntos internos de Venezuela los dirimen los venezolanos”, sostuvo la venezolana. A continuación dirigió todo su arsenal contra Almagro, a quien acusó de tener “una posición intervencionista sobre los asuntos internos de Venezuela” y de estar “mandatado por Washington”.
Pero luego hubo un punto de inflexión, negociaciones diplomáticas y el encuentro entre Kerry y Rodríguez, que allanó el camino al diálogo. Este significativo cambio se da en un momento crítico en Venezuela, donde se multiplican los saqueos y la violencia.