Se trata sólo uno de cada cuatro adictos
La proporción sube en la Capital y baja mucho en el Interior. Crece la preocupación por la droga en la clase alta.
Es entre los que tienen cuadros severos. Crece la preocupación por la venta de drogas.
Sólo uno de cada cuatro adictos severos está bajo tratamiento. El dato surge de un informe sobre narcotráfico y adicciones que difundió ayer la Universidad Católica Argentina (UCA). A nivel nacional, solo el 26% de los adictos severos se trata. Los especialistas lo atribuyen a un déficit en la asistencia.
En el Interior, el número es más bajo. Un 16,3% está en tratamiento en las grandes ciudades y la cifra es aún más baja en ciudades pequeñas y pueblos: sólo el 13,2%. En la Capital, el panorama cambia radicalmente: el 45,2% tiene trata- miento, y el 35,6% en el conurbano bonaerense.
La respuesta puede hallarse en un censo de Sedronar de 2009 sobre centros de tratamientos asistenciales. El 40% se encuentra en la Ciudad de Buenos Aires y la provincia (238 de un total de 592). El informe de la UCA revela también que el 57% de los adictos severos no se trató nunca, el 22% lo hizo sólo una vez y el 21% más de una.
Es la primera vez que el Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) incorpora este dato en su habitual informe sobre drogas y narcotráfico. El estudio determinó también que las adicciones severas constituyen un problema en el 3,4% de las familias urbanas del país. De acuerdo a los investigadores que participaron en la elaboración del informe, es posible que haya un subregistro, es decir que el número relevado sea inferior al real. “Hay gente que no declara que está en tratamiento pa- ra evitar la estigmatización. Pero fundamentalmente vemos que no hay una política clara de ayuda para los adictos, ni tampoco un sistema de promoción eficiente de la asistencia”, dice Solange Rodríguez Espínola, doctora en psicología e investigadora del ODSA.
Según los especialistas, el problema afecta tanto a las instituciones del ámbito público como a las del privado. Los lugares de atención son escasos en función de la demanda, lo que evidencia aún más el problema: “Imaginemos lo que sería si el número de personas con problemas de adicción se deciden a tratarse”, dice Rodríguez Espínola.
Según la encuesta, realizada por la UCA a 129.000 personas de entre 17 y 25 años, el 43,7 % consumió sustancias ilegales alguna vez en su vida y el 22,1 % lo hizo durante el último mes.
Otro enfoque del informe refleja el crecimiento sostenido de la percepción del ciudadano sobre los puntos de venta de droga. Según esta mirada, la venta de drogas en los barrios se incrementó un 55% entre 2010 y 2015, en particular en los de mayor vulnerabilidad social. El estudio comparativo determinó también que el registro de la venta de drogas es mayor en los barrios con falta de presencia policial, en los que creció de 35,2% a 55,8% en igual período.
El registro de venta de drogas para los de nivel socioeconómico medio alto fue cercano a un 25%. Para el nivel bajo-vulnerable y en villas y asentamientos osciló entre 40,2% y 79,9% en el período 2015, con un pico del 84,1% en 2014.
También se habló del abuso de drogas de diseño, a propósito de lo ocurrido durante la fiesta Time Warp. En este sentido, se destacó especialmente el dato del informe que apunta directamente a lo que ocurre en sectores medios y altos. En este grupo, la preocupación por la venta de drogas no para de crecer y es donde más se percibió en el último año. Creció de 22,3% a 24,7%.
Durante la presentación, realizada ayer en el microcine de la UCA en Puerto Madero, se tocó el tema del cannabis medicinal, que empezó a tratar el Congreso de la Nación esta semana: “No me parece un tema prioritario, habiendo tantos temas de salud pública que no se tratan, como el Mal de Chagas. Es un tema que cubre una demanda muy baja”, dijo Agustín Salvia, investigador jefe del Observatorio de la Deuda Social Argentina.
El 43,7 % consumió drogas alguna vez en su vida y el 22,1 % lo hizo en el último mes