El empresario K cumple 6 meses de prisión y pide la excarcelación
Su abogado busca que una pericia médica demuestre que empeoraron sus problemas de salud.
Cumplió 6 meses en el Penal de Ezeiza. Mientras su patrimonio quedó expuesto públicamente ( oficialmente se contabilizaron $ 1.373 millones en inmuebles), algunas de sus empresas comenzaron a cerrar. A Lázaro Báez ya lo visitan menos personas y en el listado la familia no figura, sólo esporádicamente lo ve su hijo Martín, que permanece en Buenos Aires, doblemente procesado por lavado de dinero. Le realizarán una pericia médica que su abogado Maximiliano Rusconi espera que sea prueba suficiente para insistir con la prisión domiciliaria.
Con 20 kilos menos, una diabe- tes no controlada “sin la dieta que requiere”, problemas de tensión y un cuadro cardíaco, el empresario K -según sostiene su abogado- sólo “desmejoró estos meses desde que está en Ezeiza”. Por este motivo es que insistirá en pedir la prisión domiciliaria nuevamente. El juez Sebastián Casanello que investiga a Báez por lavado de dinero ya rechazó esta solicitud. Hoy le realizarán a Báez una pericia médica de la que participará el cuerpo de médicos forense y un médico de parte, Mariano Castex. La defensa busca sostener que su pedido es correcto. “Si el informe llegara a decir que el encierro en máxima seguridad perjudica su estado y el juez no hace nada es un verdadero escándalo y lo expone a una gran responsabilidad”, indicaron desde el entorno de Báez. Casanello que embargó en $ 800 millones a Báez y a su hijo Martín, lo procesó y ordenó su detención, determinó que los argumentos esgrimidos por Rusconi en el primer pedido, no eran suficientes para brindar una prisión domiciliaria. Remarcó en su decisión que puede seguir recibiendo atención en el Penal de Ezeiza, donde recibe controles periódicos y se le sumarán estudios regulares. A lo largo de estos seis meses, el círculo de Báez fue reduciéndose cada vez más. En el Penal de Ezeiza sólo lo visitan sus abogados Maximiliano Rusconi que lo defiende en la causa de la Ruta del Dinero K y Gonzalo Díaz Cantón que lo representa en el caso por evasión previsional por $ 33 millones. Ambos coinciden al momento de plantear que ven una salud “delicada y desmejorada”. El juez Casanello insiste que no corre riesgo permaneciendo en prisión. Con internas que cobran mayor relevancia según el momento, la familia lo visita cada vez menos. Tres de los hijos de Lázaro Báez permanecen en Río Gallegos donde semanalmente deben notificarse en el Juzgado Federal N° 1, la última en visitar a su padre fue hace más de un mes, Luciana la mayor de todos los hermanos. A la distancia el empresario K observa cómo su imperio se derrumba. Varias empresas de servicios, medios cerraron definitivamente y su firma insignia tiene un final anunciado. Sus contadores y presidentes de las empresas ya no se comunican él, “todos han abandonado el barco”, dijo en un escrito ante el juez.