Vaca Muerta: negocian cambiar las condiciones laborales
Están en tratativas empresas, sindicatos y el Gobierno. Flexibilizarían condiciones laborales para bajar los costos.
Tras la parálisis en el sector, gremios y empresas buscan revivir Vaca Muerta. La caída en la actividad petrolera en la región alarmó a los sindicatos, que se reunieron ayer con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, y los titulares de las empresas YPF, Pan American Energy y Total. La semana pasada ya se había producido un encuentro con el fin de crear un convenio de trabajo “amigable” que pueda facilitar la llegada de futuras inversiones. Los gremios de la industria petrolera aceptarán cambios en las condiciones laborales a cambio de mantener el nivel salarial y los puestos de trabajo actuales. A su vez, las compañías reclaman al gobierno beneficios fiscales.
“No está cerrada la negociación”, dijo a Clarín el senador y titular del sindicato de Petroleros Privados, Guillermo Pereyra, al término de la reunión. Pereyra participó junto a Miguel Ángel Gutiérrez, presidente de YPF, Marcos Bulgheroni (Bridas y PAE), Gustavo Motta y JeanMarc Hosanski (Total), y Manuel Arévalo ( Petroleros Jerárquicos).
Los empresarios coinciden en que para desarrollar Vaca Muerta es preciso lograr un costo que haga rentable la inversión en el contexto de un deprimido precio internacional del petróleo. “La idea es no perjudicar el salario de los trabajadores, sino buscar un nuevo modelo de desarrollo, donde también el Estado deberá revisar los costos de logística. Cada parte deberá aportar lo suyo”, sostuvo el gremialista. Las empresas pretenden que el Gobierno y las provincias petroleras autoricen desde la eliminación de las retenciones a la importación, a una reducción de Ingresos Brutos unificando la alícuota al 2%. Y piden que las provincias productoras reduzcan su participación en las regalías del 12% actual a un 8%. También, que reduzcan tasas municipales e impuestos locales, como el de los sellos. “Queremos generar las condiciones necesarias para que lleguen inversiones y se reactive el yacimiento, pero sin perder el terreno conquistado por los trabajadores”, explicó Pereyra. El convenio permitiría contratar personal a plazo fijo, de manera que las empresas que lleguen al país puedan prescindir una vez que culmine la tarea de extracción. También se negocia eliminar las “horas taxi”, el tiempo de traslado entre los hogares y los pozos.