Por las protestas, Macri fue duro con los ferroviarios y los pilotos de Aerolíneas
Los acusó de “resistirse al cambio” y les pidió que sean “responsables”. Sobre la aerolínea de bandera, dijo: “Nos cuesta a todos dos jardines de infantes por semana”
En una semana signada por la tensión en la negociación paritaria entre los pilotos y Aerolíneas Argentinas y en una jornada en la que el servicio de trenes se vio afectado por un paro de personal jerárquico ferroviario, el Presidente salió a jugar muy fuerte contra los gremios: los vinculó a “sectores que se resisten al cambio”, dijo que no quieren “entender hacia dónde va la Argentina” y les pidió “ser responsables”.
Si bien no es la primera vez que marca con firmeza su postura ante una medida de fuerza de un gremio, la escena que eligió Mauricio Macri para enviar el mensaje a pilotos y ferroviario fue lo que sorprendió: un acto, en la Quinta de Olivos, en el que anunció -junto al gobernador peronista Juan Schiaretti- el pago de la deuda que Nación mantenía con la provincia desde la gestión kirchnerista por asistencia a la Caja de Jubilaciones.
Para meterse en el tema, Macri contrapuso la actitud de los gremios con “el diálogo respetuoso” que, dijo, impulsa su Gobierno con el resto de la dirigencia política y representa “el mejor mensaje que se le puede enviar a los argentinos que luchan por salir adelante”. “Estamos bajando un mensaje distinto que choca a veces con sectores que se resisten a este cambio que ha emprendido la Argentina”, indicó, en el inicio de sus críticas.
Primero, Macri buscó dejar en evidencia a la Asociación Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos (APDFA), que convocó a un paro por un reclamo vinculado al Belgrano Cargas, pero que pese a generar que sólo no fuera a trabajar un 3% de la masa ferroviaria, terminó afectando al servicio metropolitano de trenes ya que incluyó piquetes en las vías y en algunos accesos a los talleres. “Por un conflicto con un pequeño gremio de los trenes de carga, se paró varias horas todo el transporte de pasajeros, y eso es no entender hacia dónde va la Argentina, es no entender que tenemos mucho por mejorar en el transporte de carga y en el transporte de pasajeros”, cuestionó.
El Presidente bajó la orden de no retroceder ante estas medidas: “Ya hicimos las denuncias penales. El mecanismo del patoterismo ya no va más”, avisó el ministro de Transporte Guillermo Dietrich. En efecto, según pudo saber Clarín, por los bloqueos y cortes que afectaron a las líneas Sarmiento, Mitre, Roca, San Martín y Belgrano Sur, el Gobierno ya presentó tres denuncias.
Macri también buscó anticiparse a la decisión que adoptará la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), que convocó a una asamblea para este jueves, luego de que se tensaran las negociaciones con Aerolíneas Argentinas. “Lo mismo estamos viviendo en Aerolíneas”, prosiguió el mandatario. Es que en el Gobierno vislumbran que, trabadas las negociaciones paritarias, los pilotos puedan tomar una medida de fuerza. “Un paro nos cuesta por día US$ 6 millones”, afirman. Macri pidió “responsabilidad” y “solidaridad” para contribuir a que “en dos años se pueda lograr que Aerolíneas no le cueste a a la Argentina cómo le ha costado” desde que fue estatizada. “Hoy Aerolíneas nos cuesta a todos los argentinos dos jardines de infantes por semana, y tenemos que construir 3 mil jardines”, precisó. En rigor, durante la gestión K, la compañía demandó ayuda del Estado por un promedio de 700 millones de dólares al año. Para 2016, la gestión de Isela Constantini planea reducir el déficit a US$ 350 millones y lograr un equilibrio en un plazo máximo de 4 años.
En la Rosada aseguraron que los dichos de Macri apuntaron a concientizar a los gremios respecto a la necesidad de no tensar la cuerda en la paritaria y que no esconden una segunda intención: al menos por ahora, parece zanjada la discusión respecto a la conveniencia de que la aerolínea siga siendo estatal.