El Gobierno vuelve a licitar dos importantes centrales electricas
Las empresas venían reclamando una deuda millonaria. Enarsa les pagará el 5% de lo que demandan.
Mientras las altas temperaturas apremian la generación de energía eléctrica, la empresa estatal Enarsa salió a relicitar la operación de dos importantes centrales del país.
Se trata de las centrales Ensenada de Barragán, en La Plata y Brigadier López, en la provincia de Santa Fe. La primera deberá inyectar, cuando esté finalizada, 847 megawatios y la segunda 420MG, es decir una potencia equivalente a la generada por Atucha I y II.
Hasta ahora, ambas centrales (Barragán y López) fueron construidas, en su ciclo abierto, por una Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por las firmas IECSA e Isolux. Sin embargo, por una deuda millonaria que la UTE mantenía con Enarsa, la empresa estatal de energía creada por el kirchnerismo, el Gobierno actual decidió rescindir el contrato con la UTE.
Hugo Balboa presidente de Enarsa explicó que, cuando comenzó la gestión macrista, la deuda reclamada a Enarsa sumaba unos $ 8.900 millones, teniendo en cuenta los dos contratos ($7000 millones por el ciclo abierto y otros $1600 por el ciclo cerrado, más las actualizaciones) de ambas centrales.
Tras la negociación, el Gobierno acordó pagarle a la UTE $500 millones, “aproximadamente un 5% de lo reclamado”, según Balboa.
Con lo cual, en las próximas dos semanas, los funcionarios de Enarsa reabrirán la licitación para la operación de las dos central.
Hoy, ambas están operando casi a la mitad de sus posibilidades: Barragán está generando unos 567 MG y Lopez, unos 280 MG. Una situación que el Gobierno necesita apurar, dada la emergencia eléctri- ca en la que está sumido el país.
Según explicó el titular de Enarsa, “de la suma pretendida por la UTE para el primer ciclo, unos $ 1000 millones correspondian a asimetrias del decreto 1295 de obra publica; otros $1000 millones a costos financeros, y el resto, a otros gastos de reingenieria y a mayores costos de mano de obra”, entre otros items.
De la negociación también for- maron parte una presentación ante la SIGEN por el ciclo abierto ($ 1.600 millones), deudas de la UTE, beneficios arancelarios que habia recibido la empresa y que debieron descontarse, mas un adelanto que Enarsa le habia pagado en mayo a la empresa cuando aún pensaba retomar los trabajos.
Por otra parte, la empresa estatal Enarsa también decidió comprar los materiales de la UTE, por unos 1100 millones de pesos para finalizar el vínculo con la empresa en una "rescisión de común acuerdo". También debió cerrar acuerdos con el sindicato de la UOCRA para definir los salarios.
Ahora, el proceso de licitación duraría unos dos meses, según estimó el funcionario de Enarsa. Y las centrales estarían operativas “no antes de diciembre del año que viene”, señaló su titular, Balboa.