“Me tomo el mentado año sabático”
La conducción de programas de televisión es un ejercicio carismático que puede llevarte por insondables caminos. Hay conductores con idéntica pericia para ciclos de preguntas y respuestas o para programas donde se enjaula a la moda. “Yo tengo lo que me merezco”, subraya Lalo Mir, fiel a un linaje que siempre lo mantuvo al margen de las peleas de (Mario) Pergolini y (Elizabeth) Vernaci. Lalo está por encima de eso. Y de ellos. Incluso es un referente para colegas desde que las FM eran una frecuencia casi desconocida.
En su trato laboral se muestra paternalista de una manera en que la actitud puede confundirse con simpatía. Le piden un autógrafo. “Después”, responde. Ahora él quiere confirmar que su famosa animalidad radial entra en un parate. “Sí, me tomo el mentado año sabático. Hace mucho que lo vengo planeando y me dije: cuando cumpla diez años haciendo el programa ( Lalo por hecho, La
100) me tomo un descanso. No es nada improvisado. El verdadero asunto es saber si aguantaré un año sin radio”. Continuará. con el de Pettinato, ¿Quién aguantará más? ¿Lalo, Petti o Mick Jagger?
Podríamos confundir a Lalo con un integrante de Les Luthiers. Se lo decís y con la mirada te hace saber que no le causa ninguna gracia la comparación. Pasan los integrantes de una banda nueva llamada Barco. Se los presentan y él saluda de uno en fondo. “Hola Barco”, “Hola Barco” y así. Son cuatro los Barco.
Mister Mir es un tipo que viene guionado desde la Rock&Pop, pero su gracia consiste en improvisar alrededor de la información que recibe de colaboradores cercanos. “Tengo guías, cosas que me escriben, cosas que escribo yo. Carlos Barragán fue mi guionista durante diez años. Me gusta identificarme con los textos de los demás”, cuenta el conductor estrella. “Luego hago una mixtura con toda la información que recibo, pero el 80% de lo que digo sale del material recibido previamente”. El programa que va por Encuentro junta a músicos argentinos y de la región, músicos nuevos y no tanto. Son ceremonias que después tienen larga vida en Youtube. La Cúpula es un inmejorable loft que en cuestión de horas se transforma en estudio de grabación de audio e imagen. Esta vez la lista incluye La Orquesta Típica Fernández Fierro, Elena Roger, Onda Vaga, Tonolec, Mimi Maura, etcétera.
Hoy, Massacre es el grupo más llamativo. Su líder se hace llamar Walas y es el de los zapatos plateados. Todo radica en hablar demasiado bajo o en hacer sonar risas operísticas. Dice Lalo: “Soy un tipo que de alguna manera inhibe. El rock me tiene bien referenciado al margen de las generaciones y desde Radio Bangkok y su mitología (...) En todos estos años tuve propuestas insólitas, pero por suerte nunca las necesité. No necesité hacer nada que no fuera lo mío. Empecé con el rock y ahora amplié el territorio a otras músicas y otras artes. En este programa hago de maestro de ceremonias mientras que en la radio soy el payaso”.
¿Qué te sale con más naturalidad? “El payaso, sin dudas”.