¿El último Superclásico?
Carlos Tevez dijo por qué evalúa irse de Boca.
En 2007, un puñado de meses antes de ganar la Liga de Campeones de Europa con Manchester United, Tevez dejaba en claro algo: “Yo voy a volver a Boca a los 30 años y me voy a retirar ahí, joven, para poder jugar al fútbol con mis amigos del barrio”.
El Apache todavía no sabía que jugaría (y también sería campeón) en el otro equipo de Manchester ni que sería ídolo por sus vueltas olímpicas en Juventus. Pero nada de eso trastocó sus planes. Ocho años después de esa declaración, con 31, regresó a Brandsen 805. Tevez siempre dijo que volvió para retirarse en el equipo de sus amores, que no quería volver a irse del país (cons- truyó una casa en la zona norte, readaptó a sus hijos al colegio, se casará este mes y volvió a tener cerca a sus amigos del barrio que tanto extrañó en Europa) y que no había lugar en el fútbol que lo llenara tanto como ponerse domingo a domingo la camiseta de Boca. Y ese es el principal resguardo que tienen todos en el club para asegurar que Carlitos se quedará.
Ante cada consulta sobre el tema, Guillermo repitió que “se quedará al menos hasta junio para terminar el torneo”. Daniel Angelici también fue tajante hace un mes: “No tengo dudas de que se quedará con nosotros. Tengo una relación de muchos años con Carlitos y sé que es muy difícil acostumbrarse a vivir en nuestro país después de diez años en Eu- ropa, pero va a terminar el torneo con nosotros y después definirá qué hace”. Después de la conferencia de ayer, el vicepresidente Horacio Paolini reflexionó con Clarín: “Los hinchas de Boca queremos verlo jugar y retirarse con nuestra camiseta y no en China, pero somos agradeci- dos con él por todo lo que nos dio y aceptaremos cualquier decisión que tome. En lo personal, creo que se quedará”.
A mitad de año, cuando la Libertadores se esfumó, Carlitos había lanzado una cataratas de críticas sobre el día a día del club. Y cada
uno de sus pedidos fue escuchado. Desde los cuestionamientos al por entonces Director Deportivo (Juan Simón), pasando por el pedido para que vuelva su amigo Fernando Tobio y hasta la construcción de un nuevo gimnasio (el jugador había dicho que sólo había una cinta en condiciones para correr), todo se fue acondicionando para que él estuviese más cómodo. Eso ayudó a que volvieran algunas sonrisas en la semana. El club se adaptó al molde de Tevez y por eso esperan
que él permenezca en 2017, al margen de lo que pueda ocurrir dentro de la cancha con el certamen local. Carlitos lo sabe.
“No tiene que ver con jugar o no la Libertadores del año que viene. La motivación está cada vez que me pongo la camiseta de Boca. Eso es lo que me hace feliz”, contó Tevez en su conferencia previa a un Superclásico que lo mostrará como titular pese a que en los últimos días no se pudo entrenar por una sinovitis que lo tiene a maltraer desde que retornó al país. Y aunque recordó que “los clásicos contra River no los disfruto ni los juego bien porque no puedo romper la barrera de jugador e hincha”, también puertas adentro son conscientes de que estos partidos son los que lo siguen manteniendo con ganas de jugar al fútbol, que es el verdadero problema de fondo en la cabeza del N° 10.
Llegué a Boca y salimos campeones después de mucho tiempo. No pudimos ganar la Libertadores, pero hay que entender que todo no se puede”. Lo de hacer la ‘gallinita’ contra River es parte del pasado y fue un error que quedó para la historia. Esa misma noche les pedí perdón a los hinchas”.