Bautismo Superclásico
Gallardo ratificó lo que había dicho y ayer lo puso de titular. Mina ya sabe lo que es ganarle a Boca.
El lateral izquierdo de River lleva sólo 5 partidos en Primera, pero el domingo se dará el mayor gusto de su vida, y apenas a los 18 años: tendrá su bautismo en el Superclásico frente a Boca. Todo futuro.
Los 18 años de Luis Olivera no son los de cualquier pibe que empieza a afrontar la vida, luego de terminar el secundario. El fútbol, en muchos casos, adelanta los procesos de responsabilidad de los juveniles que llegan al máximo nivel a temprana edad. Y este es uno de esos casos. Porque el lateral izquierdo, a pesar de todo, sigue siendo un chico. De hecho, su padre va a buscarlo a los entrenamientos para llevarlo de vuelta a su casa. Con apenas cinco partidos jugados en Primera División, al joven nacido en Villa de Mayo le llega el momento de jugar un Superclásico por primera vez, de acuerdo al equipo que paró Marcelo Gallardo en el entrenamiento de ayer en el RiverCamp de Ezeiza. De esta manera, Olivera, a un mes y medio de haber cumplido los 18 (el 24 de octubre), recibirá un gran regalo. Y no será el único que tenga su bautismo ante Boca, con la camiseta de River. También debutarán en un Superclásico Augusto Batalla, otro chico surgido de la cantera Millonaria y los extranjeros Jorge Moreira y Arturo Mina.
A pesar de ser un pibe tímido, de andar tranquilo, de baja estatura (mide 1,68 metros) y menudo, Olivera despertó asombro en Gallardo a pesar de que había jugado poco en Reserva. Es por eso que el Muñeco lo subió a Primera y el año pasado lo hizo debutar en el último partido del campeonato 2015 ante Newell’s (0-2). Esa tarde, en el Monumental, Olivera, con 17 años recién cumplidos, ingresó por Leonel Vangioni. Y este año jugó de titular ante Vélez (0-0), en el torneo de Transición 2016, y ya en el actual certamen, jugó desde el inicio contra San Martín de San Juan e Independiente, la semana pasada. Además, disputó la semifinal de la Copa Argentina contra Gimnasia.
La aparición de Olivera en ese encuentro ante el Lobo fue una sor- presa de Gallardo. Es que el juvenil, que venía de una lesión muscular (distensión en el sóleo izquierdo) no figuraba en la lista de los futbolistas que iban a viajar a San Juan. Pero el técnico lo vio bien en la última práctica y no sólo decidió llevarlo, sino que lo puso de titular. Y Olivera tuvo un buen partido.
Esta semana se especuló con la posibilidad de que Gallardo optara por la experiencia de Camilo Mayada para ocupar el lateral izquierdo, pero el Muñeco lo desestimó. Primero desde la palabra. “No sé si va a jugar Mayada. Venimos jugando con un 3 natural y el equipo no va a variar del que jugó en San Juan”. Y luego, en la práctica, con el equipo que paró ayer, en el que Olivera ocupó el lateral izquierdo.
Salvo Jonatan Maidana, el resto de los jugadores de la defensa, incluso el arquero Batalla, jugarán por primera vez ante Boca con la banda roja cruzándoles el pecho. El ecuatoriano Mina ya sabe lo que es tener enfrente -y ganarle- a Boca, pero con la camiseta de Independiente del Valle, que eliminó al conjunto de la Ribera en las semifinales de la última Copa Libertadores. Al margen de sus rechazos, Mina se hizo famoso cuando dijo que “sentimos más presión en la cancha de River que en la Bombonera”. En cambio, para el paraguayo Moreira será su primera vez absoluta ante el equipo azul y amarillo. Por su parte, Batalla también sabe lo que es jugar ante Boca, pero en divisiones menores. Ahora, el pibe de Hurlingham, fanático de River, tendrá la chance de disputar su primer Superclásico en el Monumental. Y conoce lo que es ganarle al rival de toda la vida también. Con su categoría, la ‘96 lo hizo en Reserva, varias veces en Inferiores y hasta ganó dos finales en Infantiles.
Cuatro historias diferentes y un denominador común: Olivera, Batalla, Mina y Moreira, los debutantes de River en un Superclásico. Para gozar la primera vez.