Macri a intendentes PRO: ordenen sus números y gasten en obras
“La campaña es la gestión”, les dijo y les pidió detalles sobre los fondos que destinan para gastos en personal.
- ¿Vos cuánto gastás en empleados? ¿Y qué porcentaje del presupuesto va para obras?
Lapicera en mano, a lo couch, Mauricio Macri interrogó ayer a los intendentes del PRO sobre sus gestiones y el uso de los fondos de los
distritos. Habló, los dejó hablar, tomó nota de puño y letra, y les dejó una lección express: “No se preocupen por la campaña, preocúpense por la gestión”.
La tesis, que recitó Macri, sugiere que la suerte electoral de Cambiemos no depende de la campaña política de laboratorio. Casi una herejía a los mandatos del gurú Jaime Durán Barba, campañólogo premium del PRO.
“No vamos a ganar la elección con populismo y campaña, vamos a ga
nar con gestión” dijo el Presidente según reconstruyó Clarín. “La campaña es la gestión” les dejó como título Macri y puso el eje en la obra pública.
Cosas que pasan. Buena parte de las 2 horas y media que duró el almuerzo se habló de temas de infraestructura y ocurrió a la misma hora que se oficializaba que Daniel Chain dejó de ser secretario de Obra Pública.
“Ordenen las cuentas” les dijo y pidió que, al margen de los programas nacionales y provinciales, los municipios deben destinar parte de su pre- supuesto a infraestructura. “Ser intendente no debe ser solo pagar suel
dos”, tradujo un macrista. En Tres de Febrero, el presidente almorzó con catorce alcaldes PRO de Buenos Aires. Diego Valenzuela fue el anfitrión: armó la juntada -se lo propuso a Marcos Peña y Federico Salvai- y eligió el menú de mollejas y asado, y regaló alfajores Cachafaz como souvenir.
Macri se hizo escoltar por dos funcionarios nacionales: el ministro del Interior Rogelio Frigerio y el subsecretario de Asuntos Municipales, Lucas Delfino, que aparece en la grilla de posibles candidatos en el conurbano.
De Frigerio depende el área que, se acordó, será el eje de gestión en la provincia este año: viviendas. El ministro anticipó que prepara medidas para ese área y ligadas al plan PROCREAR. Viviendas está a cargo de Do-
mingo Amaya, pro-peronista tucumano que se prepara para dejar su cargo y ser candidato en su provincia contra el clan Alperovich.
Joaquín De la Torre, ministro de Gobierno bonaerense, fue el delegado de María Eugenia Vidal. De La Torre es, en cierto modo, un semi intendente: hace poco tomó licencia en San Miguel donde dejó a su segundo, Jaime Méndez.
Jorge Macri, de Vicente López y en carrera para la boleta del PRO - “es mi intendente” bromeó Macri sobre su primo, en referencia a que vive en Olivos-, Martiniano Molina de Quilmes y Nicolás Ducoté de Pilar.
Estuvieron, además, Néstor Grindetti de Lanús, el platense Julio Garro, Pablo Petrecca de Junín, Ezequiel Galli de Olavarría, Oscar Luciani (Luján), Darío Kubar (General Rodríguez), Sebastián Abella (Campana), Jorge Etcheverry (Lobos) y Héctor Gay de Bahía Blanca. El bahiense aportó la frase optimista del mediodía al decir que registra “brotes verdes” en la economía tanto “en el sector público y el privado”.
PRO puro. Habrá, se prometió en la mesa, una charla que incluya a inten
dentes de la UCR. En febrero, se contó en la mesa, habrá un encuentro de todos los alcaldes de Cambiemos con Vidal en Vicente López.
Se agendó, también, un encuentro con Frigerio por el tema viviendas sobre el que Macri bajó una línea. “No vamos a aprobar proyectos que estén lejos de las zonas urbanas, hay “especificó en referencia a completar lo que los arquitectos llaman “mancha urbana”.
El gobierno, avisó Macri, no va a financiar emprendimientos de viviendas de lugares alejados de los centros de las ciudades que luego requieren gastos extras para acercarle servicios.
Como si les tomara exámen, Macri preguntó y pidió detalles sobre gastos y repartos. Se detuvo en el renglón empleados y pidió que no aumenten
los planteles municipales. “Sean responsables y cuando decidan un gasto,“piensen en la sustentabilidad en el tiempo. Yo fui intendente, disfruten ser intendentes”, les dijo y contó que ahora, como Presidente, está “más lejos” de los vecinos y la relación termina intermediada.