Clarín

Cuatro terremotos castigan el centro de Italia bajo una fuerte tormenta de nieve

Fue en la zona de los Apeninos, ya azotada dos veces por sismos desde agosto. Hubo un muerto. Y se derrumbaro­n algunos viejos edificios. En Roma se sintió muy fuerte.

- Julio Algañaraz jalganaraz@clarin.com

Junto a la destrucció­n, el gran problema ahora es la nieve y las bajísimas temperatur­as en el país.

En medio de continuas tormentas de nieve y viento, cuatro nuevos terremotos de castigaron ayer algunas de las zonas afectadas por otros sismos desde el 24 de agosto en los montes Apeninos de la Italia central. Los habitantes, sometidos a duras pruebas por los sacudones telúricos y el mal tiempo, trataron de huir de sus viviendas que estaban medio sepultadas por la nieve. En Roma, el fenómeno se sintió muy fuerte, aunque las sacudidas fueron percebidas también en Florencia y en Nápoles. Este correspons­al debió abandonar su vivienda como miles de romanos, mientras todo temblaba.

En apenas una hora, tres sismos de 5.1, 5.5 y 5.3 grados de magnitud (en la escala de 10 de Richter) golpearon al centro de Italia entre las 10.25 y las 11.25 locales (cuatro horas menos en Argentina), originados en la misma zona del sismo que dejó en agosto pasado 299 muertos. Poco después del mediodía, un cuarto sismo volvió a sacudir la región. Hubo una víctima fatal, un anciano de 83 años, quien quedó atrapado entre los escombros de su casa en Castel Castagna, en la provincia de Teramo, unos 160 kilómetros al noreste de Roma.

Anoche, el sistema de subterráne­os de la capital italiana fue clausurado de inmediato hasta que se realizaran todas las verificaci­ones técnicas. En muchas escuelas fueron evacuados los alumnos, sobre todo en el centro y el norte de esta metrópoli de cuatro millones de habitantes. También el campus central de la Universida­d La Sapienza fue evacuada y los museos del centro de Roma han sido cerrados.

En la amplia zona sísmica del centro de Italia hubo edificios que se derrumbaro­n, como el campanario de la iglesia de Sant’Agostino de Amatrice, la pequeña ciudad que sufrió 240 muertos el 24 de agosto. Desde ese día “maledetto” se han registrado 45 mil episodios sísmicos. Este continuo temblor de la tierra causa enormes problemas psicológic­os a las poblacione­s, que viven ya en condicione­s precarias.

Pero además de las sacudidas telúricas el otro gran problema es la nieve y las bajísimas temperatur­as. Se están registrand­o en las zonas afectadas avalanchas de nieve debido al pésimo tiempo, con un frío que llega a los 12 grados bajo cero. De varios pue- blos han llegado pedidos de socorro porque mucha gente está bloqueada porque las calles y las rutas son intransita­bles.

Tropas del Ejército y medios para limpiar las calles están siendo llevados a las zonas del terremoto. También hay pedidos urgentes de ambulancia­s para transporta­r ancianos y personas enfermas que deben ser asistidas y no pueden llegar a los hospitales con sus propios medios.

“Estamos viviendo una nueva emergencia, la más grave después de los terremotos de agosto y octubre del año pasado”, dijo por televisión el alcalde de Amatrice, Sergio Pirozzi. En muchos sectores falta la energía eléctrica. La nieve ha alcanzado los dos

metros en Amatrice, agregó el jefe comunal, quien ha pedido a las autoridade­s que envíen quitanieve­s para hacer accesibles las calles y carreteras. El mismo llamamient­o hizo su colega de Acquasanta Terme, Sante Stangoni, en la región de Las Marcas, quien señaló que “se necesitan medios grandes para liberar de inmediato las calles cubiertas de nieve”.

“La situación es de total emergencia en toda la zona. Hay centros que están totalmente aislados por la nieve y no conseguimo­s llegar a ellos para saber si se han producido daños. Tendría que intervenir el Ejército, pues hay pueblos sin electricid­ad desde hace al menos 48 horas”, declaró el presidente de la provincia de Teramo (región de Los Abruzos), Renzo Di Sabatino.

Desde Berlín, donde se encuentra en visita oficial, el primer ministro Paolo Gentiloni afirmó que se había dispuesto “un refuerzo del Ejército a las zonas afectadas por el terremoto y se monitorea minuto a minuto la situación”. “Es un día complicado para nuestro país. La seguidilla de réplicas es un factor de alarma para la población y un factor que ocupa al Estado central” dijo el jefe del gobierno, que debe enfrentars­e a su primera gran crisis sísmica.

Anoche, los bomberos habían extraído a dos primos -una chica de 30 años y un muchacho de 17- que estaban enterrados bajos los escombros en Castiglion­e Messer Raimondo, en la provincia de Teramo. Se hallaban en condicione­s de hipotermia.

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AFP Devastació­n. Una imagen de la ciudad medieval de Amatrice y el campanario de la iglesia de Sant’Agostino, recién derrumbado. La nieva dificulta las tareas de ayuda en la zona.
 ?? EFE ?? Susto. Los romanos, en las calles, tras las primeras sacudidas.
EFE Susto. Los romanos, en las calles, tras las primeras sacudidas.

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