La urgencia de Boca y la necesidad de Romero acercan las posiciones
En busca de un arquero maduro, los dichos de Bauza sobre el N° 1 del seleccionado pueden facilitar la negociación.
El arquero de Boca en el primer amistoso del verano, ante Estudiantes, será Axel Werner, el rafaelino de 20 años que debutó en un Superclásico. Parece muy joven para ser dueño de semejante arco, pese a que Augusto Batalla es titular de River con esa edad. El mejor proyecto boquense para el puesto es Manuel Roffo, convocado para la Selección Sub 17 que disputará el Sudamericano en Chile. A nadie se le ocurriría confiarle la valla que defendieron Navarro Montoya, Córdoba y Abbondanzieri, entre otros, a un pibe de 17 años, a pesar de que Gianluigi Donnarumma, el 1 del Milan, debutó a los 16 y hoy, a punto de cumplir 18, es indiscutido en los rossoneri.
Guillermo Barros Schelotto, conocedor de la historia xeneize, pide experiencia para cubrir los tres palos. No importa el estilo (atajador o salidor) ni la personalidad, serio o extrovertido: el Tano Roma llegó a ese puesto con 28 años y el Loco Gatti con 31. Agustín Orion, para recordar el último caso, tenía 30 cuando se hizo cargo de la responsabilidad.
Caída la chance de Mariano Andújar (33) por la negativa de Estudiantes a cederlo, Boca apunta ahora a Sergio Germán Romero (29).
Chiquito es suplente en el Manchester United de José Mourinho y, aunque más de una vez ha dicho que prefiere quedarse en Europa aun co-
mo suplente, un comentario de Edgardo Bauza tal vez lo haga cambiar de planes. El DT de la Selección declaró que Romero puede perder su lugar fijo en Argentina si no logra continuidad en el United.
Algún dirigente atento habrá tomado nota de esas palabras y, con la aprobación de Guillermo, puso en marcha el operativo seducción.
Un primer y severo inconveniente es el contrato del misionero en Inglaterra: una cifra normal para la Premier League pero elevadísima para nuestro medio.
Hasta dónde pueda estirarse Boca y hasta dónde acepte ceder Romero serán los elementos clave de la negociación. Entre la urgencia de uno y la necesidad de otro hay posibilidades de acercamiento. Así, Boca tendría el arquero que viene buscando desde la lesión de Guillermo Sara.