Hallan muerto en la cárcel a un comisario preso por coimas
Tenía 45 años y, según su abogado, gozaba de buena salud. Los investigadores sugirieron que tuvo un paro cardíaco, aunque la autopsia aún no está lista. Gendarmería hace las pericias.
Federico Jurado tenía 45 años y estaba detenido por el hallazgo de sobres con dinero en la Jefatura Departamental de La Plata. Lo encontraron ayer en la cárcel de esa ciudad. Según los voceros del penal , habría sido “una muerte natural”. Pero el abogado de Jurado planteó dudas y dijo que el policía no tenía ningún problema de salud. El comisario era uno de los nueve funcionarios de la Bonaerense presos desde que se hallaron $ 153.000 de presuntas coimas recaudadas por las seccionales. El fiscal ordenó que la investigación de la muerte la haga Gendarmería.
¿Muerte natural por paro cardiorespiratorio o silenciamiento violento? El comisario Federico Máximo Jurado, de 45 años, preso al igual que otros ocho colegas en la causa abierta por los sobres secuestrados en la Jefatura Departamental de La Plata con dinero proveniente de presuntas coimas, fue hallado muerto ayer en la celda que ocupaba en la Unidad 9 de la capital provincial.
Las autoridades del Servicio Penitenciario Bonaerense sostuvieron que “no hay constatación de lesiones externas por golpes, cortes u otra agresión que haya determinado la muerte”. No obstante, Daniel Mazzocchini, abogado del policía, denunció a Télam: “Tenía 45 años, no tenía problemas cardíacos, siempre que suceden estas cosas dicen que es muerte natural ¿Cómo una persona que está bien físicamente puede tener una muerte así?”.
Si bien el fiscal del caso, Marcelo Martini, afirmó que el comisario “era diabético” y que “no hay signos de violencia y el informe de la médica dice que falleció por un paro cardíaco”, el abogado defensor planteó otra cosa: “Yo lo vi cianótico, tenía toda la cabeza uniformemente cianótica. No descartamos que haya muerto por asfixia con una almohada, que no deja rastros. Nadie se muere (en forma natural) durmiendo en una celda”, afirmó, aunque reconoció que su defendido “no tenía golpes o marcas”.
Mazzocchini responsabilizó a la gobernadora María Eugenia Vidal de influenciar “para meterlo preso en medio de una investigación preliminar” y calificó la causa de “política”.
Jurado compartía celda con Eduardo Laso Rojas, otro policía, que está preso por un homicidio en San Isidro. Ambos dormían en la primera revisión de la guardia de las cuatro de la mañana de ayer. Otra ronda constató la muerte a las siete. El comisario estaba boca abajo. Su compañero declaró dos horas ante el fiscal Martini.
Jurado -que nunca declaró ante la Justicia- era un “hombre sano”, según sus familiares. Pero sólo una pericia forense podrá aportar certezas. Hasta ahora, se intercalan sospechas con aclaraciones inmediatas. Ayer al mediodía, el fiscal Marcelo Martini remitió la realización de la autopsia a peritos de Gendarmería (ver El enojo...). El trámite estaría terminado durante el fin de semana.
Martini interviene, además, en el expediente que involucra a los comisarios por las coimas, por lo que Mazzocchini adelantó que lo recusará. La última acción en esa causa por parte del fiscal fue pedir a Asuntos Internos que investigue si el jefe de la Bonaerense, Pablo Bressi, sabía del sistema de recaudación ilegal.
Por eso, antes de este episodio la causa ya tenía un peso institucional gravitante. Fue Asuntos Internos de la encargada de aportar evidencias para llegar, el 1° de abril último, al operativo de incautación de los 36 sobres con 153.700 pesos en la Jefatura. Jurado, que era titular de lac omisaría 16°, habría sido uno de quienes elevaron parte del dinero a la cúpula.
Los nueve detenidos por el caso habían sido trasladados el 7 de enero a distintas unidades penales. De acuerdo con Mazzocchini, la jueza Marcela Garmendia rechazó un pedido de habeas corpus a favor de su defendido. “Temíamos por su seguridad”, insistió el abogado. Incluyó en la presunta “desidia” de la Justicia otra solicitud presentada por Marcelo Schillaci, preso en Olmos, para la atención de “una cirrosis”.
Este recluso está preso por el triple crimen de General Rodríguez y es hermano de Víctor Schillaci, quien protagonizó la fuga del penal de Alvear con Cristian y Martín Lanatta. Mazzocchini fue un participante mediático polémico en aquellos días de escape furioso, que hizo tambalear el sistema de seguridad provincial.
Rápido, el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, salió ayer a aclarar que “no hay nada irregular” en la muerte del ex comisario. “Hay que esperar el resultado de la autopsia”, apuntó. Sorprendió que fuera el portavoz de gobierno: el SPB depende del ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, quien –aportó Ritondo- “está trabajando duro en el tema”.
El parte preliminar del deceso es “por un paro cardiorespiratorio no traumático”. La muerte data de entre las cinco y las seis treinta de ayer. Jurado estaba alojado en el pabellón destinado a fuerzas de seguridad.
“Es improbable el ingreso de una tercera persona a la celda porque se mantiene con cierre externo monitoreado”, dijo a Clarín un vocero del Servicio Penitenciario.
El fiscal apoyó esta versión de los hechos: “Parece que fue muerte natural, el compañero de celda se enteró en el mismo momento. Era una persona que no tenía problemas con nadie dentro de la unidad”, comentó Martini. Casi en simultáneo, Mazzocchini se quejaba ante la prensa porque “a nosotros nos tienen en una sala mientras limpian la escena del crimen”.