Choque y escándalo en Palermo: investigan por qué tenía en el baúl armas, joyas y dinero
Ocurrió a metros del KDT. Un conductor quedó detenido. Tenía más de 30 mil dólares y 80 mil pesos.
Empezó como un choque: ayer, a las 6 de la mañana, un BMW M4 a contramano impactó de frente a un Renault Sandero cerca de la intersección entre Salguero y la Avenida Costanera, a metros de la entrada del circuito KDT. Sin embargo, la reacción violenta del conductor del auto de origen alemán –Pedro Luis Miguel, de 35 años y perteneciente a la comunidad gitana– fue más allá de la producida por un simple accidente de tránsito: se bajó
con un arma de su auto –valuado en unos 160 mil dólares– e increpó a la Policía. Con la intención de “protegerlo” de la revisación del auto que pretendía hacer el personal policial, se acercaron otros dos coches de alta gama –un Volkswagen Bora y un Smart– para también increpar a los oficiales y a los periodistas que se ha-
bían acercado al lugar.
El hecho se produjo tras la fiesta en la que se celebraron los 15 años de la hija de Miguel. El conductor del Renault Sandero fue trasladado al Hospital Fernández por padecer politraumatismos y los ocupantes del Bora y el Smart, también miembros de la comunidad gitana, se dieron a la fuga a pie luego de que el Bora chocara contra un pilote de cemento a 150 metros de donde se produjo la primera colisión. Los cuatro autos fueron retenidos en sede judicial.
Miguel, que también fue atendido por politraumatismos y más tarde fue detenido y acusado por “lesiones graves y portación ilegítima de ar
ma de guerra”. Permaneció en la comisaría 23° del barrio de Palermo y hoy deberá prestar declaración ante el juez Luis Alberto Zelaya. Es que, más allá de las heridas leves que padeció el conductor del Renault Sandero, Miguel tenía una pistola Glock de 9 milímetros y una Bersa calibre .40. Según fuentes policiales, el agresor tiene habilitada la tenencia pero no la portación del arma Glock, y ningún documento de la Bersa.
Lo más llamativo, sin embargo, fue lo que se encontró durante la requisa del auto y de una faja que Miguel llevaba consigo tras la salida del cumpleaños de 15 de su hija. Según detallaron las mismas fuentes policiales, Miguel tenía unos 30.000 dólares, 83.000 pesos, un collar de perlas, once monedas de oro, tres relojes de marca Rolex, seis anillos dorados, algunas pulseras y algunos pares de aros. El acusado aseguró que se trataba de la "recaudación" recibida por su hija con motivo de su cumpleaños, luego de que su familia organizara una fiesta con 500 invitados. Tal vez fue por eso que varias de las mujeres de la familia intentaron impedir con sus largos vestidos que se requisara el BMW, cuya trompa quedó destruida.
“En vez de ayudar (a mi hermano) cuando se bajó del auto, la Policía le quiso poner esposas”, dijo Margarita, hermana de Miguel, a los periodistas. Y agregó: "Si tu hija cumple 15 años, vos también te mamarías". El test de alcoholemia, que se practicó unas cinco horas después del choque, arrojó que Miguel tenía 0,67 gramos de alcohol por litro de sangre, por encima del máximo del límite para conducir de 0,5 gramos por litro.
Tanto el Volkswagen Bora como el Smart tenían deudas de patentes, y según confirmó la Policía, sobre el Bora recaía un impedimento administrativo para circular.
Según publicó Infobae, el primer antecedente penal de Miguel se produjo en 2000, cuando tenía 17 años y fue detenido por robo. En enero de este año, había sido detenido por participar de una banda que robaba casas en la zona norte de Pinamar, bajo la modalidad de "escruche", que es cuando se espera a que los turistas salgan de las propiedades para sustraerles sus bienes.