En el “otro” torneo, Rafaela sumó puntos vitales para calmar la angustia
La tensión en la lucha por no descender se transmitió en la cancha con propuestas limitadas.
“No ganamos tres puntos. Nos llevamos seis. Necesitamos ganar todos los partidos para salvarnos. Nada es
imposible”. Leandro Díaz, el mejor de la noche en Sarandí, autor de la asistencia en el primer gol y de la definición en el segundo, definió con la misma precisión de su pegada la realidad de Atlético de Rafaela tras el 2-1 sobre Arsenal. Quedan 14 fechas por delante, es cierto, pero la posición en la tabla de promedios es angustian
te. Está último y descienden cuatro. Con la victoria, quedó a 10 puntos de diferencia de Olimpo, en el puesto 27 y aún en la zona roja, y a 11 del equipo de Humberto Grondona.
Arsenal y Rafaela están jugando el “otro torneo”, el de los que intentan mantenerse en la categoría superior, que paulatinamente se reducirá de 30 a 22 equipos. El descenso acosa. Si no es esta temporada, será la otra. Por eso no sirven los empates. Menos para Rafaela, que está hundido en los promedios. Tampoco para Arsenal, estancado en el fondo de la tabla del torneo, con escasos 8 puntos. Ahora, a un escalón de ingresar en la zona de descenso directo.
Con este escenario, no hay propuestas ofensivas. Los entrenadores hacen lo que pueden con el material que tienen. La realidad es cruel para ambos equipos. Están mal y no juegan bien. Uno puede dominar al otro circunstancialmente, como sucedió con Arsenal en el principio del partido, cuando no se puso en ventaja porque el cabezazo de Boghossian fue bien rechazado por el arquero Hoyos. El otro puede responder con una jugada a puro toque, sin generar nada de nada en los primeros 30 minutos, y empezar cantando el primer gol.
Así festejó Gudiño, con una gran definición después de una secuencia de cuatro toques seguidos, tras el pase de Leandro Díaz. Con el 1-0, los nervios cambiaron de equipo y el dominio también. La visita se fue acomodando y Arsenal desesperando.
Grondona buscó cambiar el rum- bo con los cambios antes de los 20 minutos. Ubicó más gente en ataque. Metió a Brunetta, de buen manejo, más ofensivo. Pero el pibe se equivocó en una entrega y Rafaela no perdonó. Toque rápido de Albertengo para Leandro Díaz y 2-0.
El local intentó la heroica. Pelotazos, centros y mucho desorden. Se descudió demasiado atrás y Rafaela desperdició el tercero. Descontó Brunetta y fueron quince minutos finales de pura ilusión para el Arse; de nervios para la Crema. No hay espacio para disfrutar. Gana la tensión.