Una inédita falta de combustible dejó a Caracas casi paralizada
La capital venezolana amaneció sin nafta, tras un incendio en una refinería. Estaciones de servicio con largas filas.
La estatal PDVSA informó que había un retraso en el suministro por “razones climáticas”.
Otra calamidad más para los venezolanos. En medio de la escasez de alimentos, medicamentos y otros productos de primera necesidad, Caracas amaneció ayer sin nafta. Esto ha generado gigantescas colas de coches en las estaciones de servicio y el tráfi- co paralizado, afectando al 90% de sus habitantes y a once estados, casi la mitad del país, según encuestas que circulan en las redes sociales.
El régimen de Nicolás Maduro no ha informado sobre las causas reales de la repentina escasez de combustible que registra la capital del país petrolero más importante del hemisferio occidental, fundador de la OPEP.
A los caraqueños les toca vivir ahora la penuria que padecen los habitantes del interior del país desde hace meses, o años, como en los estados Táchira y Zulia, donde el combustible está racionado, las colas ya forman parte del paisaje urbano y los consumidores deben portar un “chip” en sus coches para tener el derecho de llenar el tanque.
La semana pasada, la estatal petrolera Petróleos de Venezuela (PDVSA) informó que había un retraso en el suministro de gasolina en el país por “razones climatológicas”.
En un comunicado publicado en su cuenta de Facebook PDVSA explicó que “por razones climatológicas en el mar Caribe y la presencia de mareas altas, se presentó un retraso de varias horas, produciendo un bajo inventario en las estaciones de servicio de la zona central del país por la alta demanda”. Agregó que el problema ya había sido resuelto y que se garantizaba el combustible.
A esto se sumó un incendio en la Refinería de Amuay, centro del país, en la fosa del Mechurio 4 de la principal refinería de crudo de Venezuela perteneciente al Centro de Refinación de Paraguaná.
PDVSA informó que el fuego fue controlado por el Cuerpo de Bomberos del Centro de Refinación Paraguaná, adscrito a la Superintendencia de Prevención y Control de Emergencias. Tras el incidente no hubo lesionados ni daños materiales.
Poco después la petrolera aseguró en Twitter (@PDVSA_PDV) que el suministro de combustible en la capital venezolana no presentaba inconvenientes: “Estaciones de servicio de la Gran Caracas están recibiendo combustible con normalidad”.
Pero la “normalidad” está lejos de volver. Este diario pudo observar que las estaciones de servicio del este de Caracas estaban a tope hasta más de
un kilómetro de coches esperando
cargar nafta. Los conductores enardecidos responsabilizaban a Maduro por la situación.
El vicepresidente de comercio y suministro de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), Ysmel Serrano, informó la noche del miércoles que retrasos en el transporte marítimo ocasionaron el problema que, aseguró, está siendo atendido. “Contamos con suficiente gasolina producida en nuestras refinerías. Seguiremos redoblando el despacho hasta estabilizar la distribución. Hacemos un llamado a la calma y a no caer en falsos rumores de sectores que juegan al caos”, escribió en Twitter.
Para el diputado, economista y ex directivo del Banco Central José Guerra, la escasez de gasolina se debe a que “PDVSA está quebrada”, no ha hecho la inversión necesaria para el mantenimiento de las refinerías. “La ineficacia de Maduro es la culpable de las calamidades de los venezolanos”, afirma.
El líder opositor Henrique Capriles afirmó que de unas 290 estaciones de servicio de la región capital 90 no estaban funcionando por falta de combustible y el resto presentaba largas filas. Capriles dijo en un programa que difunde por las redes sociales que según un reporte que recibió de un sindicato de trabajadores de PDVSA, la escasez de gasolina es consecuencia de un déficit de 79% en la producción, averías en las tuberías y un “grave problema” de endeudamiento que le ha impedido a la petrolera pagar las deudas a empresas que realizan el mantenimiento de los tanques y a los proveedores internacionales que suministran los aditivos especiales para producir combustible.
Venezuela tiene reservas de crudo de 300.900 millones de barriles, las mayores del mundo. Y la nafta más barata del planeta. El litro de 91 octanos cuesta un bolívar (0,0014 dólares a la tasa oficial más alta). Con un dólar a la tasa del mercado paralelo (unos 2.906 bolívares, 3,8 veces más alta que la oficial) se pueden comprar 2.900 litros de esta nafta.