PROTAGONISTAS COMO NUNCA
Entre tantos cambios que sacuden la tele, hay uno no menor: las mujeres (como Kate del Castillo), ocupan roles principales.
Hay una lectura que quedará reservada para los sociólogos, estudiólogos y académicos de especialidades varias. Causa o consecuencia, productores, artistas y emisoras coinciden en que, de a poco, van ganando lugar en las pantallas los roles protagónicos femeninos, situación que incide en otros terrenos. La propia Robin Wright contó el año pasado cómo fue la negociación para obtener el mismo salario que Kevin Spacey, su coprotagonista en House of Cards. Del lado de la ficción se apunta a construir personajes más reales (con resultados dispersos, es cierto) que buscan acercarse al devenir cotidiano de la audiencia femenina.
El tema fue eje de uno de los paneles de debate durante la jornada There’s Never Enough TV, que organizó Netflix a mediados de febrero en Nueva York, con algunas de las actrices que protagonizan parte de su programación 2017. En el punto de partida, una pregunta que podría responder cualquiera: ¿con qué protagonista te identificabas cuando eras chiquita?
Jessica Henwick (inglesa, de familia asiática, participó en Games of Thrones y se luce en Iron Fist) menciona a Mulán, “porque muestra que uno no es fuerte en función de su masculinidad”. Para Kate del Castillo (la mexicana estrena Ingobernable este fin de semana, ver aparte) es Orlando “porque es una mujer muy fuerte pero también muy viril en muchos aspectos, y todavía muy femenina”. Gillian Jacobs (ex Community, ahora en la segunda temporada de Love) dice haber estado obsesionada con Katherine Hepburn “porque tomó el control de su carrera en un modo en el que pocas mujeres lo hacían en esa época, y se produjo a sí misma cuando no podía conseguir trabajo”. Danielle Brooks (la entrañable Taystee, que toma la voz de la comunidad afroamericana en Orange is The New Black) responde que, en rigor de ver- dad, se sentía atraída por aquellas figuras con las que se sentía identificada físicamente “grande, con curvas y chocolate”, y que no eran muchas.
¿Cuál sería la definición de una mujer protagonista en 2017? “Acabo de ver el documental de Katie Couric en National Geographic y creo que nuestra definición de mujer y varón está empezando a cambiar y eso me da la esperanza de que se pueda ir ampliando la definición”, arranca Danielle. “También es importante que nosotras como actrices podamos ir junto a los escritores. Antes para el rol principal fuerte tenías que ser un poco perra, seductora, voluptuosa”, apunta Kate. “Tengo ganas de ser sin tener que preocuparme por lo que esa persona es. A la gente le gusta etiquetar a las mujeres, ponernos en categorías de ‘apropiada’ o ‘nena de papá’ y no quiero limitarme a ser una cosa o la otra”, se suma Logan Browning (protagonista de Dear White People, estrena a fin de abril). Gillian, la chica de las morisquetas en Love, señala que los personajes más icónicos de las series de televisión siempre han sido hombres anti-héroes, como Tony Soprano o Walter White de Breaking Bad, y que le gustaría ver personajes femeninos con esas mismas licencias. Pero hay otra cuestión que se plantea en el terreno de la comedia. “Recuerdo un director que me pidió que dejara de hacer ‘caras raras’, algo que probablemente no le hubiera dicho a un hombre, porque ellos pueden pero nosotras tenemos que pensar en nuestra apariencia”, comparte. “¿Se imaginan a un director que en los 90 le diera una indicación así a Jim Carrey?”, se pregunta Jessica.
Para Kate empiezan a aparecer cambios desde la perspectiva del estereotipo latino. “Estamos leyendo guiones con roles mucho mejores, ya no estamos haciendo sólo mucamas y prostitutas”, señala. Lo mismo sucede con lo que se espera de una chica asiática, apunta Jessica. Danielle coincide, aunque remarca que todavía hay un camino por recorrer en lo que refiere al talle. “Quiero ser el foco de interés amoroso de una historia. Quiero maquillarme, lucir fabulosa y tener a un hombre embobado por mí. Quiero estar en una película de suspenso, en una película de acción. Puedo correr también. No quiero que la gente sienta que hay una limitación por el tamaño”, repasa.
El tema genera impacto del otro lado del escritorio. “Las mujeres han tomado un rol protagónico en el mundo y naturalmente también en la pantalla. Al momento de encarar un nuevo proyecto cuidamos que las historias contemplen la diversidad del género femenino y también los múltiples puntos de vista con los que pueden abordarse las problemáticas de las mujeres de hoy. Presentamos un modelo de mujer que explora su complejidad mientras se desenvuelve en diálogos inteligentes y tramas sofisticadas”, responde Gustavo Grossman, vicepresidente corporativo de Networks de HBO Latin America.
El primer ejemplo que aparece es el de Girls, creada, dirigida y protagonizada por Lena Dunham. También Big Little Lies (Nicole Kidman, Reese Whitherspoon y Zoe Kravitz); Insecure (creada y protagonizada por Issa Rae); y Veep, donde Julia LouisDreyfuss recorre el camino hacia la presidencia de los Estados Unidos.