Afirman que la píldora anticonceptiva no eleva el riesgo de sufrir algún cáncer
Es la conclusión de un amplio estudio que se realizó durante décadas en Gran Bretaña, con más de 46.000 mujeres.
Quienes toman regularmente la píldora anticonceptiva no tienen que temer que esto conlleve un elevado riesgo de sufrir algún tipo de cáncer, según un amplio estudio llevado a cabo durante décadas con más de 46.000 mujeres en Gran Bretaña, y que ahora se publica en la revista especializada “The American Journal of Obstetrics and Gynecology”.
Los investigadores señalan que la ingesta a largo plazo de métodos anticonceptivos hormonales no aumenta el riesgo de cáncer. En algunos tipos de cáncer incluso parece ser que protege, apuntan. El equipo que dirige Lisa Iversen, de la Universidad de Aberdeen, recopiló datos de 46.022 mujeres, usuarias y no usuarias de la píldora. En los años 1968 y 1969 se pidió a las mujeres que participaran en el estudio.
En un principio, los ginecólogos suministraban con regularidad datos sobre la salud de las mujeres a los investigadores, pero después los obtuvieron de un registro nacional de casos de cáncer de Escocia e Inglaterra. Los investigadores estuvieron reci- biendo datos hasta 2012. Así, se trata del estudio más lago realizado sobre el riesgo de cáncer por tomar la píldora anticonceptiva.
Los datos ponen de relieve que 30 años después de tomar la píldora las mujeres tenían un menor riesgo de sufrir cáncer de ovarios e intestino grueso, así como de tumores en la mucosa uterina. Si bien mientras se tomaba la píldora aumentaba ligeramente el ries- go de cáncer de cuello uterino y de mama, ese riesgo bajaba a valores normales cinco años después luego de usarla. Por ello en total se equilibra el riesgo de cáncer, estiman los investigadores. Es decir no existen in- dicios de que aumente sustancialmente a largo plazo el riesgo de cáncer para las mujeres que en el pasado tomaron la píldora.
El estudio subraya así los resultados de otras investigaciones llevadas a cabo sobre este tema. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, que depende de la Organización Mundial de la Salud (OMS), emprendió en 2012 una evaluación en la que llegó a similares conclusiones.
La combinación habitual de estrógenos y gestágenos en la píldora protege del cáncer de ovarios, de endometrio y posiblemente del cáncer de intestino grueso, decía la investigación.