La fiscal general se distancia más del chavismo y rechaza la Constituyente
Luisa Ortega Díaz dijo que “la crisis sin precedentes” del país no se resuelve con una nueva Constitución.
La cúpula del chavismo está viviendo una fuerte división interna a raíz de la represión en Venezuela contra las manifestaciones y la convocatoria a una Constituyente por parte del gobierno de Nicolás Maduro. La fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, perteneciente a un sector del chavismo, rechazó de plano la propuesta del gobierno de realizar una Asamblea Nacional Constituyente donde los miembros serán elegidos de forma “sectorial o cooperativa”, y no de manera directa, universal y secreta.
“En opinión de quien suscribe, para resolver la crisis indudable y sin precedentes que atraviesa el país, no es necesario, pertinente ni conveniente llevar a cabo una transformación del Estado en los términos que podría suponer una nueva Constitución”, señaló en una carta oficial dirigida Elías Jaua, presidente de la Comisión Presidencial de la Constituyente y ministro de Educación.
Ortega recuerda que el artículo 347 de la Constitución vigente señala que el propósito de una Constituyente es transformar el Estado, crear un nuevo ordenamiento jurídico y redactar una nueva Constitución. “Lo expuesto, en lugar de propiciar equilibrios o generar un clima de paz, estimo que aceleraría la crisis, visto además el carácter sectorial o corporativo –de representación indirecta- que asoma el Decreto dictado por el Ejecutivo y que funge de líneas matrices para la elaboración de las bases comiciales del proceso de convocatoria”, afirma.
A lo que se refiere con esta crítica es que el gobierno pretende integrar la Constituyente con miembros de organizaciones oficialistas, y no elegidos en forma libre y abierta como marca la Constitución.
La funcionaria chavista fue también la primera en alertar en marzo pasado que la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia había roto el hilo constitucional al anular las competencias de la Asamblea Nacional con sus sentencias 155 y 156, por lo que planteaba una rectificación del caso.
Su postura en ese momento produjo un sísmo dentro del chavismo que motivó a la oposición a impulsar una ola de protesta para reclamar el respeto a la soberanía del poder legislativo, elecciones generales, liberación de los presos políticos y apertura del canal humanitario para tener acceso a los alimentos y medicinas.
La fisura, sin embargo, tiende a profundizarse con el segundo paso dado por la Fiscal de rechazar el proyecto de la constituyente comunal, cuyo propósito es modificar la Carta Magna para concentrar el poder en el mandatario.
En el mismo sentido se pronunció la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) luego de reunirse con representantes del gobierno. Los obispos afirmaron que la convocatoria de Maduro “es innecesaria”. “Lo que se necesita no es una reforma sino el pleno cumplimiento de la Constitución. Lo que el pueblo necesita y reclama es comida, medicina, seguridad, paz y elecciones justas”, afirmaron.