Boca tuvo un premio consuelo ante River en el Superclásico de Reserva
Tomás Fernández abrió la cuenta y Heredia marcó el segundo. “A River hay que ganarle como sea”, dijo Schiavi.
A diez días de la derrota por 3-1 en la Bombonera, la Reserva de Boca se tomó una revancha-consuelo sobre River en el Complejo Pedro Pompilio y le ganó con autoridad 2 a 0. El equipo del Flaco Schiavi fue superior al de Luigi Villalba durante los 90 minutos y se quedó con los tres puntos. Con esta victoria, Boca está a solo dos del líder Newell’s, a quien lo goleó 4 a 1 en la fecha pasada. Boca formó con Bustillos; Molina, Ramos, Heredia, Vaca; Chicco, Almendra (Goñi), Lamardo, Tomás Fernández (A. Sánchez), Luna Diale y Cabrera (Roskopf). River a Centurión; Barrios, Sibille, Vega, Gallardo (Vera); Arellano, Sosa, Moya, Burruchaga (Maciel); Rollheiser (Ferreira) y Franco.
En un primer tiempo escaso de jugadas de peligro, la apertura del marcador llegó a través de un penal mal sancionado por el árbitro Matías Arevalo a los 39 minutos. El encargado de transformarlo en gol fue Tomás Fernández. El número 11 es el que a principios de este mes hizo echar a Pablo Pérez de un entrenamiento porque lo “volvió loco” y el 8 titular le dio una fuerte patada. Fernández definió arriba y a la derecha, dejando sin chance al arquero Centurión.
Para Tomás Fernández, quien está en Boca desde la Novena hace 6 años, fue su primer Superclásico en Reserva como titular. Es oriundo de Junín y tiene 19 años. A los 13 viajó con su representante a España para realizar una prueba en Villarreal y quedó: “Estuve alrededor de tres semanas. Iba a hacer las Inferiores ahí, pero por un problema de papeles me tuve que voler”, le contó a Clarín el pibe que tiene como referente a Cristian Pavón.
El segundo gol no tardó en llegar. El central Agustín Heredia conectó de cabeza un preciso centro tras un tiro libre de Mauro Luna Diale (expulsado a los 25 minutos del segundo tiempo) y selló el resultado final en la primera mitad del juego.
En el visitante estuvieron presentes tres hijos de ex jugadores: Nahuel Gallardo y Mauro Burruchaga fueron titulares, mientras que Gianluca Simeone estuvo en el banco.
River apenas insinuó peligro en el área rival, pero la seguridad de la defensa y del arquero Javier Bustillos no se debilitó en ningún momento. El arquero xeneize fue citado por Guillermo Barros Schelotto para realizar la última pretemporada, pero a los tres días se enfermó de paperas y debió regresar. “Fue muy doloroso. Tuve la oportunidad que todo jugador sueña y no pude aprovecharla. Me perdí de estar en los clásicos de Mar del Plata y en la gira por México”, se lamentó. Bustillos jugó al baby fútbol en el Club Saenz Peña y en Parque y desde hace 11 años viste el buzo azul y amarillo. El partido de ayer también fue su estreno como titular ante River.
En el complemento se pudo observar a un River que, necesitado por el resultado, salió a buscar el descuento pero las imprecisiones de tres cuartos de cancha en adelante se lo impidieron. En cambio, Boca jugó con el resultado y manejó los tiempos, hasta la expulsión de Luna Diale. Lo hizo a través de Agustín Almendra, quien se transformó en la figura del partido. “Ahora le apuntamos al campeonato”, sentenció el volante.
Felíz por la victoria, Rolando Schiavi explicó: “No fuimos vistosos, pero estos partidos hay que ganarlos como sea. Con juego o con empujones y voluntad”. Y agregó: “El jugador de Boca se tiene que acostumbrar a que cuando tiene la camiseta de River enfrente hay que ganar”. Boca ganó y el
Flaco sueña con el título. Como los pibes Fernández, Bustillos y Almendra.