El cardenal alemán Gerhard Ludwig Müller

Gerhard Ludwig Müller, nacido en Maguncia (Alemania) el 31 de diciembre de 1947), es un cardenal católico y teólogo alemán. De 2012 hasta el 1° de julio de 2017 fue prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (el ex Santo Oficio), que se encarga de controlar la ortodoxia de la doctrina. Asimismo, ocupó la presidencia de la Pontificia Comisión “Ecclesia Dei”, de la Comisión Teológica Internacional y de la Pontificia Comisión Bíblica. Hasta su alejamiento, era una de los purpurados de mayor peso en la curia romana o gobierno de la Iglesia. Müller estudió teología y filosofía en la Universidad de Maguncia, la Ludwig-Maximilians-Universität München y la AlbertLudwigs-Universität Freiburg. Como tal, es reconocido como una de las cabezas más brillantes de la Iglesia. Müller fue ordenado sacerdote el 11 de febrero de 1978 y, desde entonces, desarrolló una brillante carrera eclesiástica hasta que, tras 16 años como profesor de teología dogmática en la Universidad Ludwig-Maxilian de Munich, el recién electo papa Benedicto XVI lo nombró prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, en julio de 2012. Ese mismo puesto había sido desempeñado por el pontífice cuando, como el cardenal Joseph Ratzinger, actuaba como el custodio de la ortodoxoa teológica bajo el Papa polaco Juan Pablo II. Posteriormente, Müller fue el encargado de la publicación de todas las obras (la llamada Opera Omnia, de 16 volúmenes) de Benedicto XVI en alemán. El Papa Francisco lo creó cardenal en febrero de 2014. Se destacó como crítico de posturas aperturistas del papa argentino, en particular en relación a temas ligados con la familia y la posibilidad de una bendición de las segundas nupcias tras un recorrido penitencial. Según Müller, esa práctica no es coherente con la voluntad de Dios.