Independiente busca salir de una minicrisis ante el renovado Huracán
Holan mete mano en el local, que quiere ser candidato. Alfaro arma un equipo nuevo para pelear la permanencia.
Uno, el local, pondrá en marcha una nueva aventura en un club que, de a poco, empieza a recuperar protagonismo. El otro, que acaba de zafar del descenso, eligió encarar la temporada con ambiciones como mejor modo de esquivar esos promedios que acechan. Desde las 20.05, en Avellaneda, Independiente y Huracán se presentarán en la Superliga con ambiciones renovadas y sueños intactos.
El dueño de casa ingresó de golpe en zonas turbulentas después de un torneo más que aceptable. La llegada de Ariel Holan -mirado de reojo al comienzo- le permitió enhebrar una serie de 21 partidos con una sola derrota, que incluyó el pase de ronda en las Copas Argentina y Sudamericana. Un empate ante Lanús en la última fecha, cuando mereció más, lo dejó afuera de la próxima Copa Libertadores. Aun así se fue aplaudido.
Ese buen panorama se oscureció de golpe: la salida de Emiliano Rigoni al Zenit ruso pareció traer cierta confusión y el equipo entregó una pálida imagen en Tucumán, ya sin el cor- dobés. Atlético le ganó 1-0 y lo llenó de dudas que, con poco juego y casi sin llegadas, van más allá de cómo reemplazar al ambidiestro cordobés.
Así las cosas, Holan meterá mano en un equipo que, con pocas variantes, casi salía de memoria. Jonás Gutiérrez y Martín Benítez tendrían lugar entre los once, mientras que Nazareno Solís, curiosamente anunciado días atrás como refuerzo de Huracán, quedó anoche muy cerca de llegar. En tanto, siguen las gestiones por los colombianos Leonardo Castro, Felipe Pardo y Marlos Moreno.
Por el lado de Huracán, la llegada de Gustavo Alfaro a la dirección técnica parece funcionar como borrón y
cuenta nueva. Y el retorno de Ramón “Wanchope” Abila, quien llegó a préstamo hasta fin de año luego de que Boca adquiriera la mitad del pase, ilusiona a todo Parque de los Patricios.
“Tengo mucha expectativa. Ansiedad por llegar al debut de la mejor manera. Lo mínimo que quiero es clasificar a una copa. Pero sería una falta de respeto prometer un título”, dijo Alfaro, quien confía en la experiencia del arquero Marcos Díaz y los defensores Martín Nervo (decidió quedarse) y Carlos Matheu, y la explosión de un jugador listo para el gran salto: Alejandro Romero Gamarra.