El Sub 23 hizo historia en Egipto y le dio al vóleibol argentino su primer título mundial
Tras ser finalista hace dos años en el Sub 21, esta camada ilusiona con un rico futuro para este deporte.
El grito de “¡ Dale, campeón! ¡Dale,
campeón!” se escuchó bien fuerte en el complejo deportivo de El Cairo, donde el seleccionado masculino sub 23 conquistó el primer título mun
dial para el vóleibol argentino. El equipo dirigido por Camilo Soto hizo historia al derrotar en la final del torneo por 4 a 2 (15-10, 15-11, 16-14, 14-16, 13-15 y 15-9) a Rusia en un partido intenso y emocionante. El broche de oro de una jornada inolvidable fueron los reconocientos individuales que se llevaron Germán Johansen, elegido como el mejor jugador del torneo, y Matías Sanchez, como el me-
jor armador.
Los juveniles argentinos jugaron un partidazo ante una de las poten
cias de este deporte, que buscaba revalidar el título que había logrado en 2015 en Emiratos Árabes Unidos.
Este torneo le sirvió a la Federación Internacional de Vóleibol para probar un nuevo formato de partidos que se juegan al mejor de siete sets y con parciales a 15 puntos.
Más sólidos en ataque y en bloqueo, los dirigidos por Soto se llevaron los tres primeros sets con autoridad y quedaron a uno de la gloria. Los rusos reaccionaron y lograron adueñarse de los dos sets siguentes.
Pero con el festejo tan cerca, Argentina no estaba dispuesta a dejar pasar su oportunidad y salió con todo a disputar el sexto parcial, que fue palo a palo hasta que el marcador quedó igualado 9-9. Entonces, presionando desde el saque, bien parado en defensa y con más precisión que su rival, el seleccionado nacional ganó seis puntos consecutivos para sellar el histórico triunfo.
El capitán Gastón Fernández fue el máximo anotador con 20 puntos, seguido de Johansen (16), Brian Melgarejo (12) y Agustín Loser (10). Aunque la verdadera figura fue ayer el equipo, claramente.
La victoria tuvo un poquito de sabor a revancha para los argentinos. Porque hace dos años, en el Mundial Sub 21 de Tijuana-Mexicali, Rusia le había negado a esta misma camada de jugadores -17 de los 22 integrantes del equipo campeón formaron parte del plantel en el torneo mexicano- la chance de subirse a lo más alto del podio al imponerse en la final por 3 a 2. Y porque les había ganado el partido que jugaron en la fase de grupos en El Cairo, el único que perdió Argentina en su camino al título.
“Todavía no puedo creer que ganamos. Fuimos capaces de vencer a un rival duro y uno de los poderosos del mundo. Nos confiamos un poco después de ganar los primeros tres sets y por eso perdimos el cuarto, pe-
ro enseguida nos dimos cuenta que necesitábamos volver a trabajar duro para ganar el título que habíamos soñado por años. Estamos felices
porque hicimos historia”, dijo Soto. A Argentina el título mundial se le había escapado tres veces. Además de aquella derrota con Rusia en 2015, en la categoría Sub 23 también se había perdido la final de 2011 en Río de Janeiro y en la Sub 19, la del Mundial de Resistencia-Corrientes 2015 .
Ayer, en El Cairo, el sueño dorado del vóleibol argentino se hizo realidad de la mano de un equipo de talentosos jugadores que invitan a ilusionarse con un futuro brillante.