La Justicia aprobó y impulsa el control biométrico de las elecciones

La Cámara Nacional Electoral destacó el “muy buen funcionamiento” del control biométrico en la zona norte del país, que se hizo por primera vez en las elecciones PASO del 13 de agosto y sirvió para reforzar la “certificación de identidad” de los votantes. El objetivo de la Justicia fue evitar la “sustitución de identidad” y “sumar confianza en el acto electoral”, ya que en otras elecciones hubo denuncias

de irregularidades, como por ejemplo el voto de personas fallecidas. Hubo 257.000 personas que participaron en la Prueba de Identidad Biométrica, en 1.052 mesas de Chaco, Corrientes, Formosa, Jujuy, Misiones y Salta.

El 82% de los votantes participó del sistema, que no era obligatorio, en 110 escuelas del norte del país. Pero el 6,6% de las autoridades de mesa se negaron a utilizar el sistema. Además, en algunas provincias el porcentaje fue más bajo por una cuestión

cultural, como Formosa y Chaco, que estuvieron en el orden del 60% de participación, “por una resistencia cultural a sumar nuevos elementos de garantía y control del proceso electoral”, dijo a Clarín una fuente de la Cámara Electoral.

Y agregó: “Nuestra expectativa era que sólo el 40% de los votantes validara sus huellas con las registradas en la base de datos del Registro Nacional de las Personas. Pero el sistema superó todas nuestras expectativas y el 91% de los que participaron en la prueba biométrica obtuvieron una vertificación positiva de su identidad, a través de la huella digital almacenada en el sistema”.

Fuentes de la Justicia destacaron que la utilización del sistema biométrico no reemplazó al padrón electoral impreso, ni a la acreditación de identidad según el procedimiento tradicional. La utilización de estos dispositivos fue complementaria y, “en ningún caso se impidió la emisión del sufragio por parte de los electores en base a la verificación biométrica”.

Sin embargo, la prueba permitió detectar casos de ciudadanos que se enteraron que otra persona ya había votado en su lugar. Fue lo que ocurrió con una señora, que hace dos años había perdido su DNI y alguien votó por ella en una mesa de Salvador Mazza, en Salta, con ese DNI extraviado. Por esa situación se inició una causa judicial, a cargo del fiscal Ricardo Toranzo. “Como tenemos la huella de la que votó en su lugar, estamos tratando de identificar su identidad, para aportar al juzgado”, dijo una fuente de la Cámara Electoral.

“El resultado fue altamente exitoso y los equipos funcionaron muy bien”, dijo Andrés Rómbola, representante de la empresa Smartmatic, que proveyó los equipos y el sistema.

La prueba biométrica se volverá a realizar en las elecciones generales del 22 de octubre, en las mismas mesas y escuelas que en las PASO, “para darle continuidad a la implementación”, aseguró una fuente de la Cámara Electoral. Y añadió: “Estamos analizando que luego haya una ampliación de la muestra o que se traslade a otras provincias, como Buenos Aires, para próximas elecciones. Pero eso todavía no está definido”.