Lousteau se relanzó en la Ciudad y llamó a combatir el “fanatismo”
Con críticas a “la grieta” que, a entender de su espacio, le impidieron tener un mejor desempeño en las primarias, Martín Lousteau lanzó ayer su
campaña para octubre. “Compartimos con el PRO la importancia de dejar atrás el pasado. Tenemos acuer
dos y diferencias en el presente”, hizo equilibrio el candidato a diputado por Evolución, en un discurso muy moderado y en la que quizás fue la única alusión al oficialismo. En el Teatro Beckett del Abasto, también habló la otra espada de la lista de Evolución, la periodista Débora Pérez Volpin, primera candidata a legisladora de la Ciudad. Ambos se sentaron en sillones blancos en el escenario, en un cuarteto que completaron la diputada radical Carla Carrizo (segunda diputada) y el socialista Roy Cortina, jefe de campaña.
Los radicales porteños junto a los socialistas levantaron la candidatura del ex embajador de Mauricio Macri en Washington, que busca proyectarse para pelear otra vez en 2019 la Jefatura de Gobierno.
“Estamos viviendo tiempos de fanatismo. Nos acompañaron en las PASO un cuarto de millón de porteños. Necesitamos crear un movimiento de fanáticos del no fanatismo”, dijo en un llamado implícito a evitar la polarización. En las primarias, obtuvo 13% y quedó tercero.
Cortina sostuvo que “hubo un ruido ensordecedor de la polarización y el fanatismo que le hacen mucho daño al país”. Carrizo justificó el rol de Evolución: “Competimos porque el oficialismo ya ganó. Queremos ayu- dar a construir gobierno”. Y Pérez Volpin criticó al gobierno porteño: “La grieta o un muro invisible nos está separando. Hay que ocuparse de las cosas urgentes. Hay 30 escuelas tomadas, y la ministra citó ahora a los chicos cuando ya se perdieron 20 días de clases”. El teatro quedó chico.
Lousteau se propone “nacionalizar” su discurso y la díficil misión de pelearle el segundo lugar al PJ, que obutvo el 20% en las PASO.