Hotesur: Máximo Kirchner habló de la “transparencia que caracterizó a mi familia”
Indagado por el juez Ercolini, el diputado entregó un escrito en el que negó lavado de dinero con los hoteles.
Con similitudes al escrito que la semana pasada presentó su madre, Cristina Kirchner, su hijo Máximo se defendió de las acusaciones sobre lavado de dinero en el marco de la causa Hotesur SA -la firma familiar dueña del hotel Alto Calafate- con un paper de 20 páginas, que le entregó al juez Julián Ercolini. Justificó los negocios con Lázaro Báez (preso por lavado), habló de una imputación con “relato vago”, explicó su rol en la empresa basándola en una “relación familiar y de confianza” y aseguró que todo fue hecho con “la transparencia que caracterizó a nuestra familia”.
Máximo Kirchner tuvo un paso fugaz por los Tribunales de Comodoro Py, donde por segunda vez fue indagado en una causa por presunto lavado de activos. Visiblemente más delgado, sin hablar con la prensa y con el acompañamiento de La Cámpora, citó el escrito de 69 páginas de su madre, al plantear que se “vulneraron de manera grosera las pautas más elementales que hacen al debido proceso legal”.
Entre los puntos centrales del escrito que le entregó al juez, Máximo desconoció la imputación en su contra; dijo que se trata de una “grave acusación sin siquiera atribuírseme un hecho puntual, concreto y específico de carácter prima facie delictivo”, y que no es más que “un relato vago”.
El diputado también justificó los negocios de su familia con Lázaro Báez: “las operaciones comerciales que se describen absolutamente regulares y lícitas, fueron declaradas por las partes intervinientes ante todos los organismos de control pertinentes, instrumentadas de conformidad con las prácticas legales, llevadas a cabo dentro del circuito bancario y por las que se pagaron todos los impuestos correspondientes”, aseguró.
Máximo buscó explicar su propio rol en la trama de negocios investigada por Ercolini, respecto de la cual aseguró que “mi intervención en los actos de comercio que se llevaron a cabo entre los años 2005 y 2009 tuvo lugar, básicamente, en mi carácter de mandatario de Néstor y/o Cristina Kirchner. Tal actuación fue desarrollada en el marco de la relación familiar y de confianza existente, ateniéndome en todo momento a los límites del mandato conferido”, dijo el diputado, y señaló que todo lo que hizo en la empresa investigada por lavado, “fue con la transparencia que siempre caracterizó a todas las operaciones comerciales realizadas por nuestra familia”.
En esa línea también admitió y defendió los contratos de alquiler firmados por él en nombre de Hotesur, reiteró que las condiciones contractuales convenidas “son absolutamente lícitas y se ajustaron a los parámetros del mercado”, y que Báez le pagaba a través de cheques cuya acreditación está “debidamente facturada y registrada”. ■