Afirman que Teherán sigue cumpliendo el acuerdo nuclear con Occidente
Irán ha cumplido en los pasados dos meses y medio con todas las exigencias del acuerdo nuclear pactado con seis grandes potencias en 2015, según informó ayer el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA). El trabajo de la entidad, que depende de la ONU, pone en entredicho los argumentos del presidente Donald Trump, quien viene ejerciendo presión para enterrar el pacto.
De acuerdo con el informe confi- dencial de la OIEA, emitido en Viena y que se filtró a la prensa, Irán mantiene sus inventarios de uranio enriquecido dentro de los límites de pureza y cantidad acordados, con lo que se busca garantizar que Teherán no desarrolle armas nuclear a corto plazo. También las reservas iraníes de agua pesada, de la que se puede extraer plutonio -otra sustancia con posibles fines bélicos-, se mantienen por debajo de los umbrales máximos permitidos, según certificaron los inspectores de la OIEA. Las autorida- des iraníes también mantienen paralizadas las obras en Arak, donde Teherán tenía previsto construir un reactor de agua pesada que podría producir plutonio, un material que se usa en bombas nucleares. El informe subraya asimismo que Teherán sigue permitiendo el uso de mecanismos de vigilancia a distancia y sellos electrónicos, así como el trabajo de los inspectores, incluidas las visitas por sorpresa a sus instalaciones.
Todos estos datos ponen en entredicho la estrategia de la Casa Blanca de Trump quien, pese a las advertencias de sus principales asesores, amenazó con abandonar el acuerdo nuclear con Irán si no se corrigen sus “defectos” y dio al Congreso hasta el próximo 13 de diciembre para imponer nuevas sanciones a Teherán si lo considera necesario.
Un diplomático, conocedor del trabajo de verificación, destacó hoy en Viena que “la OIEA no tiene por el momento ninguna preocupación”, pese a las presiones de Israel y también de Arabia Saudita -dos enemigos regionales del poder persa- para que se anule el acuerdo.
El tratado nuclear de Irán, que entró en vigor en enero de 2016 tras ser negociado bajo el mandato del ex presidente Barack Obama, limita distintas actividades atómicas de Teherán por un plazo de entre 10 y 25 años. A cambio, las potencias firmantes -Es- tados Unidos, Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania- levantaron sus sanciones comerciales y diplomáticas contra el régimen persa.
Ante las presiones ejercidas por Trump contra lo que califica “un mal acuerdo”, el director de la OIEA, Yukiya Amano, se reunió la semana pasada con la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, para respaldar el pacto. Según explicó ayer el diplomático, la OIEA dedica casi una cuarta parte de todas sus inspecciones realizadas a nivel mundial solo al caso de Irán. El Congreso estadounidense debe decidir en las próximas semanas si juzga necesario restablecer las sanciones levantadas después de que Teherán aceptara limitar su programa nuclear, una perspectiva que anularía de facto el acuerdo y dispararía las tensiones en la conflictiva región de Oriente Medio. ■