Entre Elvis Presley, Michael Jackson y Prince
Desde que era un niño, Bruno Mars lo único que quería hacer era actuar de Michael Jackson o Elvis Presley. Se vestía, practicaba y salía al escenario para representarlos para el público de Honolulu, Hawaii. Junto a su familia de músicos y actores, recorría los escenarios como el Pequeño Michael. Su parecido físico al Jackson infantil se potenciaba cuando copiaba sus movimientos, imitaba cada acento y el tono de voz fue lo que lograba cada aplauso que estallaba cuando hacía con mucha gracia el moonwalk.
Mars se crió con ese objetivo en mente y, al llegar a Los Ángeles con 18 años para firmar con Motown Records, creyó que su sueño se estaba por concretar. La disquera que había sido semillero de grandes artistas, incluido Jackson, ya no era tal y pronto se retiró para ir a otra discográfica.
Ya sin pretensiones en el sello en el que nacieron los Jackson 5, y con el éxito como aliado, Bruno Mars fue comparado con Prince por su autonomía al componer, producir y editar canciones. y co- mo si eso fuera poco, durante la entrega de los últimos Premios Grammy, Bruno interpretó Let's Go Crazy en honor al fallecido cantante de Minneapolis, y se levó una ovación. Vestido con un traje violeta para venerar al autor de Purple Rain, el funk, el soul y el pop fueron muy bien interpretados por el hawaiano. Y su participación dejó una puerta abierta, ¿Bruno Mars podrá ocupar el espacio vacío que dejó la partida de los dos grandes íconos del pop?