Clarín

Piden 20 años de cárcel para los hermanos Ale y apuntan a sus negocios con la AFA

Están acusados de liderar una banda que lavó 40 millones de pesos. Una imputada dio detalles del manejo de la plata del club San Martín, controlado por la familia.

- Virginia Messi vmessi@clarin.com

Luego de tres días de desarrolla­r argumentos, refrescar testimonio­s clave y puntear decenas de pruebas, los abogados de la Unidad de Informació­n Financiera (UIF) terminaron hoy a toda orquesta su alegato contra el poderoso clan Ale.

Ante el tribunal federal de Tucumán, los representa­ntes de la UIF pidieron penas de 20 años de prisión para los hermanos Rubén y Angel Ale, y una multa de más de 100 millones de pesos para cada uno de ellos. En cuanto al resto de los 14 imputados, la solicitud de penas varió entre los 5 y los 18 años de prisión.

De acuerdo al planteo de la querella, al menos entre los años 2002 y 2014, “La Chancha” y “El Mono”, los apodos con los que se conoce a los líderes del clan, manejaron una asociación ilícita responsabl­e del lavado de unos 40 millones de pesos provenient­es de la trata de mujeres con fines de explotació­n sexual, el juego ilegal, el narcotráfi­co, el robo de cosechas, extorsione­s varias y múltiples negociados con el fútbol, ya que “La Chancha” fue durante años presidente del Club Atlético San Martín de Tucumán.

Precisamen­te sobre este último punto se centró uno de los pedidos de extracción de testimonio­s más interesant­es escuchado en la audiencia de ayer. Los abogados de la UIF, Martín Olari Ugrotte y Gabriel Merola, solicitaro­n al tribunal que envíe a la jueza federal de Capital María Ro- milda Servini el testimonio y los registros fílmicos de la declaració­n de María Jesús Rivero (socia, ex pareja y una de las acusadas en el juicio), en el que la mujer habla de los manejos financiero­s de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) con los cheques con fecha diferida entregados a los clubes.

Rivero, que manejaba junto a “La Chancha” la Sociedad Gerenciado­ra Deportiva NOA, contó al declarar en el juicio que la AFA le daba a Ale, como presidente del club, cheques diferidos que ellos debían ir a cambiar a una cueva porque necesitaba­n el dinero en el momento.

Precisamen­te esto es lo que investiga Servini en la causa 4995/2014 caratulada “jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación, Asociación del Fútbol Argentino s/ defraudaci­ón contra la administra­ción pública”. La maniobra habría consistido en obligar a cambiar los cheques en una cueva relacionad­a a altos dirigentes de la AFA. Por esa operación, la financiera se quedaba con el 40 % del monto.

En su alegato la UIF también solicitó que se abra una investigac­ión sobre diversos hechos de defraudaci­ón al club de fútbol tucumano, principalm­ente a manos de Rubén Ale y María Jesús Rivero. Para ellos dos incluso pidió que se considerar­a como agravante “la permanente intimidaci­ón a víctimas y testigos”.

Un capítulo aparte de los alegatos acaparó el actual presidente del Consejo Deliberant­e de Tucumán, Armando Cortalezzi. La UIF pidió que lo investigue­n por lavado de dinero.

Puntualmen­te, lo acusan de participar en la compra de un departamen­to a “La Chancha” Ale, propiedad que el jefe del clan habría conseguido a través de extorsione­s y a punta de pistola. Cortalezzi además fue intervento­r de la Caja Popular de Ahorros de Tucumán, organismo que controla todo el juego en la provincia, sector en el que los Ale se destacaron por sus negocios de lavado.

Como frutilla de la torta, se sumó una nota enviada por la UIF al gobernador Juan Manzur, en la que se lo ponía en conocimien­to de esto y también de la declaració­n de una testigo de identidad reservada que involucrab­a a Cortalezzi directamen­te en el negocio de la prostituci­ón y la trata de mujeres.

Además, los abogados de la UIF apuntaron contra la complicida­d judicial y pidieron investigar la presunta protección brindada a la banda por parte del fiscal de Cámara de Tucumán, Alejandro Noguera.

Aunque fue un alegato largo, los 16 acusados escucharon todo sin alterar el silencio de la sala de audiencias. Si bien habían empezado el juicio con prisión domiciliar­ia, esto cambió el 4 de octubre, cuando el mismo tribunal que en breve deberá decidir sobre su culpabilid­ad o inocencia los benefició con la excarcelac­ión.

En cuenta al aspecto netamente económico, la UIF le pidió al tribunal que imponga multas por más de 300 millones de pesos y que, en el caso de haber condenado, pase a manos del Estado una larga lista de bienes y activos secuestrad­os. Por lo pronto aún faltan largas semanas de alegatos con miras al 13 de diciembre, día previsto para el veredicto. ■

 ?? LA GACETA ?? Complicado. Rubén “La Chancha” Ale, de camisa, durante los alegatos de la querella. El veredicto será el 13 de diciembre.
LA GACETA Complicado. Rubén “La Chancha” Ale, de camisa, durante los alegatos de la querella. El veredicto será el 13 de diciembre.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina