La combinación de dos drogas podría reemplazar la quimioterapia en la leucemia
Ambas se venden en la Argentina. El proceso de aprobación en EE.UU aún está pendiente.
Los buenos resultados obtenidos en un reciente ensayo de un nuevo tratamiento para la leucemia linfocítica crónica (LLC) podrían cambiar el paradigma de la enfermedad. Se trata de una combinación de dos drogas - que ya se venían utilizando por separado- y que mostró tasas de respuesta de hasta el 93% en pacientes recaídos tras una primera línea de tratamiento. Las drogas que se combinaron en este estudio son venetoclax y rituximab, ambas aprobadas y utilizadas en la Argentina.
Aunque todavía el uso combinado de estas drogas está en proceso de aprobación por parte de la Food and Drug Administration (FDA), el trabajo fue presentado ayer entre las principales conclusiones del 59° encuentro anual de la Sociedad Americana de Hematología, que se celebró en Atlanta, Estados Unidos.
John Seymour, autor principal del trabajo y director de Medicina Oncológica en el centro Peter MacCallum de Australia, explicó a Clarín el alcance del estudio Murano: “Lo más importante de este trabajo es que combinar ambas terapias para el tratamiento de la LLC en pacientes que sufren recaídas nos permitiría evitar la quimioterapia, y ésa es la novedad que estamos presentando”.
Del estudio Murano participó un universo de 389 pacientes de 20 países. Aquellos que ya cumplieron un tratamiento de 24 meses (ciclo completo) y demostraron una respuesta profunda, interrumpieron el tratamiento. Seymour consideró que esta nueva terapia demostró “en algunos casos remisión completa de la enfermedad, por lo que podría ser la piedra fundacional y utilizarse en un futuro en otros tipos de cáncer de la sangre, como el linfoma”, añadió. Aunque todavía es pronto pensar en la posibilidad de que pueda convertirse en una terapia de primera línea, Seymour cree que esta nueva combinación podría llegar a ser una “primera opción de tratamiento en un fu- turo cercano”.
La leucemia es un cáncer que se origina en las células madre de la médula ósea. Los pacientes presentan una alteración en los linfocitos, que comienzan a reproducirse en forma anormal. La LLC representa el 30% de todas las leucemias y es la más frecuente entre los adultos.
Entre los síntomas más habituales se encuentran la anemia, la propensión a desarrollar infecciones, moretones o sangrados frecuentes, inflamación de los nódulos linfáticos (bilaterales e indoloros), fiebre, debilidad, cansancio y pérdida de peso.
Aunque en Argentina no hay datos de incidencia de este tipo de cáncer, se puede estimar que hay entre uno y dos casos nuevos cada 100 mil habitantes por año. Esto es, entre 400 y 800 nuevos casos por año, extrapolando datos de países europeos demográficamente parecidos.
Consultada sobre la dimensión de este nuevo avance, la doctora Marta Zerga, presidenta de la Sociedad Argentina de Hematología (SAH) explicó que esta nueva terapia combinada “permitiría, además de evitar el uso de drogas quimoterápicas en pacientes recaídos de LLC, también la suspensión del tratamiento tras dos años, ya que logra una respuesta profunda que se traduce en una sobrevida libre de progresión de la enfermedad”. Destacó que las dos drogas ya están comercializadas en el país, “por lo que en la ANMAT sólo requeriría una actualización que es la combinación de ambas”. ■