Un primo de Kirchner, preso por desviar contratos de obra pública a favor de Báez
El juez Ercolini descubrió que Carlos Santiago Kirchner vació sus cuentas bancarias pese a una orden de inhibición de bienes. Está procesado en la causa por favorecer a Lázaro Báez
Carlos Santiago Kirchner se entregó ayer luego de que el juez Ercolini le dictara prisión preventiva por asociación ilícita y fraude al Estado. Lo acusan de haber direccionado contratos de obra pública a favor del empresario K Lázaro Báez. Por entonces, el primo del fallecido ex presidente era funcionario con Julio De Vido, también preso. Es el primer miembro de la familia Kirchner que llega a la cárcel. Tenía cuentas y departamentos en EE.UU.
Por primera vez un Kirchner quedó detenido. El juez Julián Ercolini ordenó la prisión preventiva de Carlos Kirchner, primo de Néstor. Fue después del pedido de los fiscales Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques quienes sostienen que hay riesgo de fuga y de entorpecimiento de la causa, al registrar que vació varias de sus cuentas bancarias pese a la inhibi- ción de bienes. El ex funcionario está procesado por asociación ilícita y defraudación por el direccionamiento de la obra pública a favor de Lázaro Báez, causa en la que quedó preso.
La decisión del juez se oficializó después que el primo del ex presidente se presentara en los tribunales de Comodoro Py. Cuatro horas después, fue trasladado al Hospital Penitenciario de Ezeiza, donde permanecerá al menos 48 horas. Allí se le realizarán estudios médicos para luego que- dar alojado en el mismo complejo.
Cuando Carlos Kirchner llegó al juzgado de Ercolini, se le informó que estaba detenido. Allí, dijo que "tiene cómo explicar todo" sobre las acusaciones en su contra. Lo poco que habló lo hizo en un tono calmado sin ocultar la preocupación sobre su situación procesal.
Ercolini coincidió con el planteo de los fiscales y lo detuvo. Ellos señalaron que, a raíz de movimientos de dinero después de quedar imputado y de otras operaciones financieras en el país y en el exterior que se mantuvieron aún estando procesado, "Kirchner podría entorpecer la investigación y fugarse" por lo que "amerita el encierro preventivo".
La causa en la que se detuvo a Carlos Kirchner es en la que junto a Cristina Kirchner, Julio De Vido, José López, Lázaro Báez y otros se encuentran procesados por asociación ilícita y defraudación al Estado, al favorecer al empresario K con 52 contratos viales por 46.000 millones de pesos.
En dicho expediente, se le trabó al ex subsecretario de Coordinación de Obra Pública un embargo de 10.000 millones de pesos.
La situación de Carlos Kirchner se complicó por información que surgió de una causa en su contra por lavado de activos, tras una presentación que hizo la Unidad de Información Financiera (UIF) que denunció un "injustificado incremento patrimonial" y operaciones financieras "sin sustento".
Pollicita demostró que Kirchner realizó "un sinnúmero de maniobras económicas y financieras" destinadas a "ocultar parte de su patrimonio y a frustrar la posibilidad del rastreo y recupero de activos, logrando sustraer del alcance de la justicia la suma de prácticamente $4.000.000".
La "descapitalización de sus activos" se realizó mientras avanzaba la causa penal en su contra y a medida que se dictaban medidas cautelares. El vaciamiento de "los principales productos bancarios personales y empresariales" fue en un "brevísimo período", dijo el fiscal.
Cuando regía sobre él una inhibición de bienes, Carlos Kirchner realizó "una extracción de su caja de ahorro de más de 548 mil pesos y 120.802 dólares, dejando ambos productos con saldo cero". Cerró además una caja de seguridad del Banco Francés, evitando el bloqueo de la misma.
A esto se sumó que tres días después que la UIF lo denunció por lavado de dinero, el ex funcionario K comenzó a realizar extracciones de sus cuentas por 600.000 dólares. Dentro de la sospecha de lavado, se remarcó que con su empresa K-SANC (una pinturería) adquirió once inmuebles (en Buenos Aires y Santa Cruz), automóviles de alta gama y una embarcación. Para el juez, "cuenta con un sinnúmero de propiedades y vehículos de diverso tipo eficaces para ocultarse o trasladarse sin riesgo de ser capturado", y por eso ordenó detenerlo.
Otro factor fue la información falsa que dio en la causa. Al declarar dijo que vivía en Presidente Kirchner 303 -en Río Gallegos-. La fiscalía constató que allí hay "un terreno baldío, destruido y abandonado, con una pared en su frente pintado con la leyenda “Cristina Presidente” y un alambrado para evitar el ingreso". El segundo domicilio que consignó, coincide con el Servicio Penitenciario de Río Gallegos. Por otro lado, Kirchner constituyó una firma en Estados Unidos "K-Joro Real Estate", con la que compró un inmueble por 625.000 dólares. Se sospecha que la empresa se usó "para canalizar fondos ilícitos". "No sólo ocultó bienes de su patrimonio, sino que también ocultó su lugar de residencia real", indicó el juez. ■