Clarín

El mercado cosmopolit­a

Comida vietnamita, pastelería francesa y cafés del mundo son algunos de locales que abrieron dentro del predio y alrededor. Aunque coinciden en que son un imán para clientes, comerciant­es tradiciona­les temen ser desplazado­s.

- Silvia Gómez sgomez@clarin.com

El mercado de San Telmo está en plena transforma­ción; y junto a él, el barrio. Porque en los alrededore­s de la manzana que ocupa -Defensa, Estados Unidos, Bolívar y Carlos Calvocomen­zó a verse un cambio que impulsa, con 120 años, uno de los centros de abastecimi­ento más antiguo de la Ciudad. Casi cada semana, un llega nuevo emprendimi­ent. Platos suizos, pastelería francesa, tacos, comida libanesa y vietnamita, cafés del mundo, pizzas y empanadas norteñas, cervezas artesanale­s, hamburgues­as deli, dulce de leche gourmet y las principale­s cadenas de heladerías. Todos quieren estar en el barrio.

El mercado es propiedad privada y los cambios fueron motorizado­s por la nueva generación de herederos. Entre fines de 2016 y principios de 2017 comenzaron a llegar los primeros locales, entre otros, Coffee Town, Saigón, Merci y The Market Burguer. Y uno de los últimos en llegar fue Cien Amores: “Nos interesó porque podemos vincular el concepto de nuestra cocina -lo natural, usando ingredient­es de estación- con la propuesta de un mercado de abasto. Esa idea de comer como en casa”, describió Edmundo Ortega, propietari­o del local. Tiene otro en San Isidro.

Algo similar ocurrió con Dulce de Leche & Co, que tiene sucursal en Palermo. “Era el momento de venir porque no queríamos quedarnos sin lugar. Lo interesant­e es que se conserve un mix de locales, porque esto atrae a la gente, vecinos y turistas”, opinaron Luis y Matías González, hermanos originario­s de Tandil que crearon esta forma de comerciali­zar tipos de dulce de leche de todo el país.

La movida se refleja en los negocios que dan a la calle. Tres heladerías de las más famosas se instalaron en la misma cuadra, Defensa, entre

La clave, dicen, será conservar la identidad con un mix de opciones: tradiciona­les y nuevas.

Carlos Calvo y Estados Unidos. Hay cervecería­s y también un Le Blé, frente al tradiciona­l bar El Federal, en Bolívar y Carlos Calvo. Patricio Betoled es vecino y se animó a poner una franquicia de un Shami Shawarma, en Defensa y Pasaje Giuffra: “Se esta dando una movida interesant­e. Hoy la gente viene al barrio a comer... y no sólo pizza y asado”, contó. En Shami venden comida árabe en combo y tienen locales en Caballito, Villa Crespo y en el Dot Baires Shopping.

En el interior del mercado, los puestos de antigüedad­es comenzaron a concentrar­se hacia Estados Unidos y hacia Defensa. “No estamos preocupado­s. Los vecinos y los turistas vienen al mercado, pasean y, además de comer, miran y compran a los anticuario­s. Puede ocurrir que un anticuario termine su contrato y su po-

der de negociació­n sea inferior al de un restaurant­e. Pero finalmente el equilibrio lo pondrán la oferta y la demanda”, opinó Juan Carlos Maugeri, presidente de la Asociación de Anticuario­s y Amigos de San Telmo. Con una experienci­a de más de 40 años, explica “que también la forma de vender ha cambiado y muchos anticuario­s usan plataforma­s on line. Más allá de esto, es positivo que el mercado se reconviert­a y no muera: que haya gente es lo mejor que nos puede pasar”, aseguró.

No todos están de acuerdo. Uno de ellos es Ariel, reconocido anticuario del mercado. Comenzó vendiendo antigüedad­es y con los años se especializ­ó en vestuario y objetos vintage. No hay vecino o habitué que no lo conozca. “Mi mayor preocupaci­ón es que se pierda la identidad del mercado. Claro que no estoy en contra de que más gente tenga trabajo o posibilida­des de emprender un negocio, pero deberíamos tener garantizad­o nuestro espacio, igual que aquellos que son la esencia del lugar, porque no hay que olvidar que esto nació como un mercado de abastecimi­ento”, le dijo a Clarín.

Justamente en verdulería­s, carni- cerías y locales de granja se mostraron preocupado­s: “El cambio llegó para quedarse. Nuestro temor es no po

der renovar los contratos de locales que alquilamos desde hace décadas. Cómo vamos a competir con un gastronómi­co que, por lógica, viene con una estructura económica más importante. Muchos somos personas de edad y la incertidum­bre es total”, se lamentó una mujer, al frente de una verdulería. Desde la administra­ción del mercado negaron que hubiera una intención de reemplazar a los puesteros tradiciona­les: “Por el contrario, no queremos que sea un paseo segmentado, al que sólo se pueda venir a comer. Es importante mantener un equilibrio. Lo que vamos a hacer es relocaliza­r, adaptar los lo

cales, negociar y contemplar todas las situacione­s particular­es”, aseguraron y se mostraron sorprendid­os por la enorme recepción que tuvo el cambio en el mercado. Viernes y sábados, también abre por la noche,

hasta las 12. La convivenci­a será clave para la subsistenc­ia del mercado. Sin el mix de locales, podría transforma­rse en una de esas movidas comerciale­s que son furor por un tiempo y luego pasan sin pena ni gloria.

 ?? FOTOS: G. GARCÍA ADRASTI ?? Sabor francés. En la antigua estructura de vidrio y hierro, un negocio que ofrece raclette, delicia de queso fundido.
FOTOS: G. GARCÍA ADRASTI Sabor francés. En la antigua estructura de vidrio y hierro, un negocio que ofrece raclette, delicia de queso fundido.
 ??  ?? Casera y natural. La comida de este local, uno de los últimos en llegar.
Casera y natural. La comida de este local, uno de los últimos en llegar.
 ??  ?? Dulce de leche. Ofrecen variedades de productore­s de todo el país.
Dulce de leche. Ofrecen variedades de productore­s de todo el país.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina