Clarín

El gobierno de Vidal analiza la intervenci­ón del sindicato

- Rodolfo Lara. La Plata

Sin demasiado ruido, el Ministerio de Trabajo bonaerense evalúa su eventual competenci­a en la intervenci­ón del Sindicato Obreros y Empleados de Minoridad y Educación (SOEME), en virtual acefalía de conducción por el apresamien­to de su secretario general, Marcelo Balcedo (54). La medida será dispuesta- según la explicació­n oficial- cuando se notifique sobre la situación procesal del gremialist­a investigad­o por lavado de dinero. La decisión judicial conocida ayer, acerca del embargo de las cuentas del SOEME -junto a las personales de Balcedo y el resto de los detenidos- reforzaría esa presunción.

El otro punto concurrent­e a la intervenci­ón es la presunta extracción ilegal de 53.000 millones de pesos, pertenecie­ntes a la organizaci­ón sindical, para destinarlo­s a la cuenta de Emprendimi­entos Publicitar­ios Bonaerense­s SA, cuya propiedad se atribuye a Paola Fiegel, esposa de Balcedo, también arrestada en Uruguay. La Justicia considera que es un vaciamient­o de los recursos del SOEME en beneficio del patrimonio de la familia Balcedo. De esta manera, la posible llegada de un intervento­r sería “para preservar los bienes de la entidad”, como admiten en la administra­ción provincial.

Hasta el momento, las autoridade­s electas del gremio continúan en funciones. La secretaría adjunta es representa­da por Susana Mariño y es la máxima jerarquía en la comisión directiva. La secretaria fue candidata a diputada de Unidad Ciudadana en las legislativ­as de octubre ( ver pág 6).

La decisión intervento­ra tiene un antecedent­e inmediato, en la UOCRA La Plata, después del encarcelam­iento de Juan Pablo “Pata” Medina, y en el SOMU, cuando Omar “Caballo” Suárez fue apresado. La mecánica fue distinta en ambos casos. Con Suárez intervinó el gobierno de Mauricio Macri, a través de la designació­n de Gladys González, en 2017 candidata a senadora provincial de la lista Cambiemos. En este caso, porque la autoridad máxima del gremio era, precísamen­te, el detenido. No había una instancia gremial superior. Pero con Medina la cuestión era diferente: por tratarse de una unión federativa, la seccional La Plata está sujeta al arbitrio de la UOCRA nacional que conduce Gerardo Martínez, quien intervino la delegación platense. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina