“En el amor hay que mandarse, pase lo que pase”
“Hay gente a la que le parece que el amor no le va a llegar nunca en la vida. Y la vida no es muy larga, así que siempre recomiendo apurarse y mandarse al frente, pase lo que pase”, sentencia Andrea Politti. Con la premisa de dejarse llevar por lo que uno siente y no por lo que uno ve, Ojos que no ven propicia un encuentro en vivo entre un “admirador” y un “admirado”, éste último con una venda que le impedirá ver a su enamorado. Con la guía de Politti y el aporte de tres especialistas -el psicólogo Gabriel Cartañá, la astróloga Lu- cía Brizuela y la orientadora sexual Paola Kullock- comenzará un juego de seducción en el que las sensaciones pondrán a prueba el grado de atracción de los participantes. -¿Cómo va a ser la mecánica del programa?
-Hay una persona que viene a declararle el amor a alguien. En la primera parte, la persona que se va a declarar cuenta quién y por qué le gusta. Puede ser hombre, mujer, pareja de mismo sexo: estamos hablando de amor. Va a haber historias de amigos, de vecinos, de gente del mismo trabajo, relaciones de po- der tipo jefe- empleado, o viejos conocidos de la primaria. La otra persona está sin escuchar nada, sin tener idea de para qué vino. Después, entra la persona a la que se le van a declarar. Está vendado porque es a través de los sentidos que va a sentir el amor de la otra persona: del tacto, del oído, de unos juegos que vamos a hacer. Yo le empiezo a dar datos a la persona vendada, y ahí se ve si tienen coincidencias, si sienten lo mismo. En ese momento se va a sacar la venda y ahí se juega todo: le dirán sí o no.