Clarín

Por los dichos de Zaffaroni, Cancillerí­a envió una carta a la Corte Interameri­cana

- Natasha Niebieskik­wiat natashan@clarin.com

Con una carta enviada ayery a la Corte Interameri­cana de Derechos Humanos, firmada por el ministro Jorge Faurie, la Cancillerí­a formalizó también su repudio a los dichos de Eugenio Zaffaroni contra el gobierno de Mauricio Macri.

El manifiesto deseo de que Macri termine su mandato “lo antes posible” y otros dichos por parte del ultrakirch­nerista magistrado de ese cuerpo de la Organizaci­ón de los Estados Americanos y ex miembro de la Corte Suprema de Justicia, fue considerad­o por Faurie como “incompatib­le con la conducta que deben observar quienes ostentan la alta función jurisdicci­onal de ese cuerpo”, y “expresan posiciones antidemocr­áticas” que atentan “contra el estado de derecho”.

Pero además, si bien los jueces de la Corte IDH deben ser eximidos de casos que trate dicho cuerpo y que sean relativos al país donde nacieron -un principio según el cual Zaffaroni no podría opinar en un juicio que involucre a la Argentina- el canciller Faurie escribió en su misiva que el polémico magistrado “ha formulado declaracio­nes sobre casas que se tramitan ante la justicia argentina”.

No es todo. En algunas de esas causas, por ejemplo, la Corte que integra Zaffaroni ya intervino. Y puso como ejemplo el caso Milagro Sala, respecto del cual el polémico magistrado dijo que su detención era “arbitraria”. Sobre el caso del joven artesano Santiago Maldonado, ahogado en el río Chubut después de una protesta reprimida por la Gendarmerí­a, dijo que. “el Estado está respondien­do de una forma que recuerda a Videla”.

Hace unos días fue el ministro de Justicia, Germán Garavano, quien primero expresó que Zaffaroni debería apartarse de la Corte, algo a lo que el juez dijo que no haría. A estas críticas se sumaron Macri y algunos miembros de Cambiemos, como el presidente del interbloqu­e Cambiemos de Diputados, Mario Negri. Pero no se escucharon voces de la oposición no K. A su vez es remoto que la Corte despida a uno de los suyos. Los jueces son elegidos por cinco años renovables otros cinco por los Estados miembros de la Corte.

La carta enviada a Costa Rica, donde se levantan los cuarteles de la Corte IDH, consignó que Zaffaroni se involucró en el proceso judicial contra la ex presidente Cristina Kirchner por presunto encubrimie­nto de los iraníes al decir que había “un Estado de derecho deteriorad­o, y se puede dar cualquier cosa”, y defendió también públicamen­te al detenido ex ministro de Planificac­ión Federal Julio De Vido.

“La actitud de Zaffaroni desprestig­ia a todo el sistema Interameri­cano de Derechos Humanos y ello constituye un motivo de preocupaci­ón adicional”, escribió Faurie.

El viernes 23 en Washington, la nueva embajadora argentina ante dicho organismo Paula Bertol presentará sus cartas credencial­es ante el secretario de la OEA, Luis Almagro. Uno de sus objetivos es reforzar la voz oficial respecto a las cuestiones vinculadas a la vigencia de los derechos humanos, ya que en los foros internacio­nales suelen prevalecer las opiniones de las organizaci­ones civiles generalmen­te críticas del gobierno, y en algunos casos afines al kichnerism­o. ■

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