El Papa pide ahora una salida “justa, pacífica y humana” a la crisis en Venezuela
Francisco habló de la situación en el país caribeño y condenó también el “exterminio” en Siria.
El Papa Francisco pidió ayer, en su tradicional mensaje de Pascua, una salida “justa, pacífica y humana” a la crisis política y humanitaria en Venezuela, donde miles de personas siguen huyendo cada día para escapar del hambre y la falta de medicamentos, mientras el gobierno de Nicolás Maduro busca perpetuarse en el poder. Pero nada sugirió acerca de quién es el responsable de esa crisis.
Francisco improvisó una homilía para la misa de Pascua en el Vaticano, el momento litúrgico más importante de la tradición cristiana que conmemora la resurrección de Cristo. Después, tras saludar a bordo del papamóvil a las cerca de 80.000 personas reunidas en la plaza de San Pedro, hizo su tradicional mensaje de Pascua y su bendición Urbi et Orbi (a Roma y al resto del mundo).
Allí recordó varios de los conflictos que vive el planeta y se refirió especialmente a la crisis en Venezuela, donde miles de personas pasan hambre o han tenido que irse del país en el medio de una gravísima escasez de alimentos y medicamentos, con una hiperinflación fuera de control y un gobierno que prácticamente ha proscripto a la oposición. El Papa pidió que el pueblo del país caribeño, que “vive en una especie de ‘tierra extranjera’ en su propio país”, encuentre “la vía justa, pacífica y humana para salir cuanto antes de la crisis política y humanitaria que lo oprime, y no falten la acogida y asistencia a cuantos entre sus hijos están obligados a abandonar su patria”. En su discurso, cargado de mensajes en favor de la paz, condenó las “injusticias y violencias”, la “miseria y exclusión”, el “hambre”, el rechazo hacia “los refugiados”, “las víctimas del narcotráfico, de la trata de personas y de las distintas formas de esclavitud” actuales.
Sobre Siria, cuya “población está extenuada por una guerra que no tiene fin”, llamó a “todos los responsables políticos y militares, para que se ponga fin inmediatamente al exterminio que se está llevando a cabo, se respete el derecho humanitario y se proceda a facilitar el acceso a las ayudas” que la población necesita “urgentemente”. Citó también la península coreana, donde deseó que “las conversaciones en curso promuevan la armonía y la pacificación de la región” y pidió a los responsables que “actúen con sabiduría y discernimiento para promover el bien del pueblo coreano y construir relaciones de confianza en el seno de la comunidad internacional”.
Francisco expresó además su esperanza en que haya paz en “Tierra Santa, que en estos días también está siendo golpeada por conflictos abiertos que no respetan a los indefensos, para Yemen y para todo Oriente Medio”. También condenó el hambre, los conflictos y el terrorismo en África.
Sobre Ucrania, esperó que “se fortalezcan los pasos en favor de la concordia y se faciliten las iniciativas humanitarias que necesita la población” y se acordó de los niños que sufren las guerras y el hambre, pero también de los “ancianos desechados por la cultura egoísta, que descarta a quien no es ‘productivo’”. “Invocamos frutos de sabiduría para los que en todo el mundo tienen responsabilidades políticas, para que respeten siempre la dignidad humana, se esfuercen con dedicación al servicio del bien común y garanticen el desarrollo a los propios ciudadanos”, dijo. ■